El consumo diario entre la población en promedio de leche es de 370 mililitros (poco más de un vaso), por debajo del mínimo recomendado por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), de 500 mililitros, lo que indica que hay “déficit proteico” en los habitantes de nuestro país.
Ante ese panorama, los productores lecheros pedimos el reordenamiento del mercado nacional, donde haya competencia, y no un desbalance, el problema se refleja en los datos de la inflación, con precios altos en los alimentos, “no hay ninguna lógica, las decisiones que se adoptan son cortoplacistas”.
Consideraciones expresadas por Vicente Gómez Cobo, presidente de la Federación Mexicana de Lechería (Femeleche), al dar a conocer la realización en la ciudad de Querétaro el próximo 26 de abril del VIII Foro Internacional de Lechería.
Expuso también que la situación para el sector lechero se ha complicado, con la elevación en los costos de producción, y para hacer frente a esta situación los productores nacionales no tienen ningún tipo de apoyo, en la mayoría de países “la producción de leche es prioridad, en Estados Unidos se apoya con 5,000 millones de dólares al año, en México es de 50 millones de pesos”, añadió que a finales del sexenio pasado se canceló el fondo existente para el sector, que a la fecha sería de alrededor de 15,000 millones de pesos.
“No hay gobierno activo, sino reactivo, a la espera de que el tiempo pase”, lo que da razón al cierre de establos, en México 250,000 familias dependen de la producción de leche, “es un negocio familiar una actividad continua”, apunto Gómez Cobo.
Habló que hay ranchos descapitalizados, productores que se convirtieron con costo social en migrantes, como ha sucedido en la región de Irapuato, Guanajuato.
Hizo notar que la producción de leche aumentó en al país alrededor de 1.6 por ciento, preciso que la producción solo cubre el 70 por ciento de la demanda, mientras que el 30 por ciento restante se compensa con importación con un costo para el país de al menos 13,000 millones de pesos.
Al respecto, estableció que los industriales prefieren comprar caro en el extranjero para tener garantizado el abasto, como el caso de la leche en polvo, toda vez que no hay capacidad de secado en el país, y ante ello, expuso que el precio de la leche en México responde a la volatilidad.
Respecto a la cantidad que Liconsa dependiente de Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex), compra a los productores de menos de 100 cabezas de ganado lechero, preciso “que solo ellos saben las cantidades de compra”, con precio de garantía que oscila entre 10.30 y 11.60 pesos el litro.
En cuanto al VIII Foro de Lechería, en Querétaro, el secretario de Desarrollo Agropecuario, Rosendo Anaya Aguilar, informó que han confirmado su asistencia representantes de Alemania, Países Bajos, España, Estados Unidos, y Nueva Zelanda, entre otros.
Destacó que por la entidad cruzan 57 carreteras, el aeropuerto internacional se ha convertido en la tercera terminal aérea del país, en la movilización de productos pecuarios, que el año pasado alcanzó las 72,843 toneladas, además de ocupar el tercer sitio del país en producir insumos para aves y cerdo, y en el caso de la industria lechera abastece el consumo de maíz y alfalfa forrajera.