«Los costes de producción hay que cubrirlos, pero es que además tienes que ganar algo más, para comprar maquinaria y para vivir…», incide el presidente de la cooperativa Alba Ganaderos. Lo explica mientras recorre uno de los patios con sombra donde las vacas se refugian de los rigores del calor bajo los ventiladores. «Cuestan 3.000 euros cada uno, una granja necesita mucha inversión», subraya.
En cuanto a las ayudas directas para el sector lácteo articuladas el pasado mes de marzo por el Gobierno en el marco del plan medidas especiales por la guerra de Ucrania, han permitido compensar las pérdidas que las explotaciones arrastran desde 2021. Las mayores han recibido un máximo de 35.000 euros.
«Las ayudas han servido para arreglar el balance de un par de meses. Aunque se agradecen, no deja de ser un parche. Otras comunidades han aportado algo más, pero en Andalucía no hemos tenido esa suerte. Las ayudas dan oxígeno y son bienvenidas, pero lo único que nos sacará del atolladero es el precio de la leche, que se pague bien», concluye.
Los ganaderos granadinos arremeten contra las grandes cadenas que siguen utilizando el cartón de leche barata como reclamo. «No quieren que el consumidor pague el litro de leche a un euro y no somos conscientes de que si esto sigue así y tenemos que traer la leche de fuera al final lo van a pagar a dos», sentencia el presidente.