El banco de inversiones Rabobank publicó su informe trimestral sobre la industria láctea, en el cual afirma que la de EEUU tuvo un crecimiento de solo 1% en la producción de leche en 2018, la expansión anual más baja desde 2013 en el cuarto trimestre de 2018. La producción de leche también se redujo en Unión Europea (UE) y Australia el año pasado, pero creció en Nueva Zelanda, América del Sur y China.
La calidad y la cantidad de alimento en la producción de leche se vieron gravemente afectadas por la sequía en Europa y Australia en 2018 y el estancamiento del crecimiento. Estados Unidos también registró sus peores niveles de producción con respecto al año anterior en cinco años.
La cantidad de ganado todavía se está reduciendo en algunas áreas, de acuerdo con el informe de Rabobank, en respuesta al aumento de los costos y los bajos precios de la leche al productor. Se espera que continúe en 2019, particularmente en Australia y con la consolidación de tambos en Estados Unidos. El stock lechero de Estados Unidos estaba con 9,365 millones de cabezas en octubre, por debajo del pico de 9,404 millones en mayo y 30 mil menos en comparación con octubre de 2017.
Por otro lado, las regiones lecheras del llamado “Big 7” (EEUU, la UE, Nueva Zelanda, Australia, Brasil, Argentina, Uruguay) se enfrentan a un mercado incierto en 2019. Rabobank prevé un “crecimiento lento y muy modesto en la producción de leche” para este año en los principales mercados de exportación. De todas formas, se espera que China eleve su ritmo de importación a una tasa de dos dígitos para 2019.
