Adecoagro anunció en la jornada del lunes la concreción de la adquisición de dos plantas de la cooperativa SanCor. La compra final, realizada por 45 millones de dólares, también incluyó las marcas “Las Tres Niñas” y “Angelita”. Mariano Bosch, CEO y cofundador de la firma líder en producción de leche líquida del país, sostuvo –en una entrevista concedida al diario Ámbito Financiero- que los planes de inversión para las mismas “dependerán de cómo evolucione el mercado” pero posiblemente “rondarán entre 10 y 15 millones de dólares”. Asimismo, destacó que pese a las dificultades que existen en el país “Argentina tiene las condiciones para ser competitiva a nivel mundial”.
La firma productora de alimentos y energías renovables completó la operación por la planta industrial de procesamiento de leche ubicada en Chivilcoy, provincia de Buenos Aires, y otra especializada en leche en polvo y quesos radicada en Morteros. La inversión apunta a ampliar su posición en el sector con el objetivo de incrementar la producción tanto para el mercado interno como para exportación.
Bosch dejó en claro que la eficiencia y la competitividad son dos obsesiones de la empresa. “Lo primero y único que nos importa es ser el productor más eficiente en los productos que desarrollamos”, dijo y remarcó que con la compra de ambas fábricas buscarán ubicarse “dentro de los principales productos lácteos a nivel mundial. El objetivo es ser competitivo en el mercado de exportación pero también para el mercado interno”.
En la entrevista, realizada por el periodista Gonzalo Zanotti, Bosch dejó importantes conceptos:
– ¿Qué significa para Adecoagro la adquisición final de las plantas de SanCor?
-Mariano Bosch: Estamos convencidos de que en Argentina tenemos las condiciones agroecológicas y hay gente con mucho conocimiento sobre la industria lechera y en cómo producir de forma eficiente, no solo leche sino alimentos. Todo ese conocimiento creemos que el país lo tiene dormido porque hace 25 años que se produce la misma cantidad de litros. En todo el mundo se creció en ese sentido y lo que vemos es que como argentinos estamos perdiendo lugar. Nuestro aporte para el sector es un sistema de producción eficiente y ahora con esta operación damos un paso no solo en ese aspecto sino que ingresamos en el procesamiento para transformarla en leche fluida, leche en polvo para exportación y la tercera gama de productos que son los quesos que se hacen tanto para el mercado local o para exportar.
– ¿Y qué lugar ocupan ambas plantas en ese sentido?
– Con estas dos plantas estratégicamente ubicadas estamos comprando la posibilidad de ubicarnos dentro de los principales productos lácteos que se consumen a nivel mundial. El objetivo es ser competitivos en el mercado de exportación pero también a nivel interno. Es el principal desafío que tenemos con esta adquisición que concretamos hoy y por la que trabajamos mucho de tiempo.
– ¿Cuál es el plan de inversión para desarrollar ambas fábricas?
– Tenemos una estrategia planeada, sin duda, pero todo dependerá de cómo funcione el mercado. Queremos poner las plantas en su máxima capacidad productiva dentro del sistema sustentable que utilizamos. Nosotros siempre aprovechamos al máximo la capacidad de nuestras vacas en litros por día de leche. Además, utilizamos un biodigestor que genera electricidad no solo para los tambos sino también para la fábrica y las comunidades que nos rodean. En general tenemos varios planes para ir en ese camino, dependerá todo de cómo evolucione pero seguramente invertiremos entre u$s 10 millones y u$s 15 millones en ambas plantas.
– Actualmente cuentan con 8 mil vacas y una producción de 300 mil litros diarios de leche, con las nuevas plantas ¿a cuánto esperan elevar la producción láctea en los próximos años?
– Hoy tenemos un proceso de inversión para llegar a 14.500 vacas y 500 mil litros por día. Eso es algo en lo que ya estamos avanzando.
– ¿En qué situación considera que está actualmente el sector lechero en el país?
– No somos ajenos a la realidad. Es un momento difícil para el sector. Sin lugar a duda para el productor no es fácil. Desde el día que fundamos Adecoagro siempre dijimos que las inversiones son a largo plazo. Hoy vemos las dificultades que existen pero creemos que en el país tenemos las condiciones para ser competitivos. Si bien hoy no estamos en el mejor momento, con ese potencial mañana podremos ir hacia allá. Cuando pensamos en esta inversión lo hacemos aportando nuestro granito de arena para que el país sea más competitivo. Si llevamos un producto de calidad a la exportación del mundo, eso a la larga se traslada al productor tambero. Lo que más nos va a interesar es que el precio de la leche sea el más alto y sustentable en el largo plazo y para eso tenemos que tener consumidores que estén dispuestos a pagar la calidad de la leche argentina.
– ¿Cuánta responsabilidad le adjudica al Estado y cuánta al sector privado con respecto a la situación actual?
– Nosotros somos emprendedores. Hoy tenemos ocho mil empleos donde antes no había nada y lo hicimos a base de emprender. La clave del desarrollo está en la iniciativa privada. Obviamente las medidas que toman los gobiernos hacen que esto vaya más rápido o más despacio ya que están afectadas. Pero somos unos convencidos de la iniciativa privada y es a lo que nos dedicamos.
– ¿Y el mercado interno qué lugar ocupa para la empresa?
– En Brasil sobre el sector lechero no tenemos nada. La empresa la iniciamos acá y luego fuimos para allá. Pero en la industria láctea creemos que Argentina tiene muchas más condiciones para ser competitivos. Tenemos muchas más posibilidades que otros lugares en Sudamérica.
-En los últimos años, producto de la crisis, SanCor redujo en gran cantidad su plantilla de personal, ¿tienen prevista la ampliación o recontratación de personal?
– Nosotros hoy llevamos a cabo la adquisición de las plantas con 280 personas que seguirán con nosotros. Van a trabajar las que hagan falta para ser competitivos y eficientes. Tenemos muchos planes a futuro pero todo dependerá de cómo evolucione el mercado y los productos. Desde que comenzamos hemos crecido en cantidad de toneladas producidas por año y en empleos generados. En este caso en particular, lo primero y único que nos importa es ser el productor más eficiente en nuestro rubro.