Hace unos días, desde la Cámara de Cámara de Supermercados y Autoservicios de Córdoba (Casac) denunciaron faltante de lácteos en las góndolas, principalmente leches larga vida.
Por este panorama, en Crónica Matinal, por radio Universidad, se consultó a Ércole Felippa, presidente de Manfrey quien consideró que el “es normal que en esta época del año la producción esté por debajo. Este año, particularmente, esa estacionalidad se ha acentuado por cuestiones climáticas”, lluvias y altas temperaturas en algunas zonas.
El productor lácteo estimó que a comienzo del mes de abril empezaría a normalizarse la situación, resaltando que “no existe ninguna posibilidad que en Argentina haya escasez de lácteos. Se produce entre un 20 y un 25 por ciento más de lo que se consume”, dijo.
Felippa cree que el temor de la falta de lácteos hace que algunos consumidores compren mas de lo que necesitan para poder asegurarse la provisión de leche.
Si bien confirmó que los mercados externos están activos y firmes por lo que a los productores lácteos les conviene exportar leche en polvo, como un commodity, no es esa la causa que provoca, en este momento, la disminución en la producción.
Un dato que reveló fue que un habitante argentino, por año, consume aproximadamente 210 litros de productos lácteos (leche, quesos, etc). “En los últimos meses ha habido una caída y un traslado en el consumo, por ejemplo en el consumo de la leche en polvo que ha aumentado porque es mucho mas accesible para el consumidor. También se detecta un traslado desde las primeras a segundas y terceras marcas donde el consumidor prioriza los precios”.