Ir al supermercado en Buenos Aires ya es más caro que en ciudades que históricamente fueron las más costosas del mundo, como Manchester, en Inglaterra. La devaluación volvió a la Argentina más barata en dólares, y a pesar de planes de “alivio” como propone el Gobierno con los nuevos “Precios Esenciales”, hubo un fuerte traslado a precios por parte de las empresas alimenticias, no sólo producto de la suba de la divisa sino también de los costos logísticos, energéticos y la presión tributaria, que sigue en niveles elevados en el país.
Casi un 40% del precio de un alimento en la Argentina son impuestos, y esa cifra se eleva al 50% en el caso de las bebidas. En Inglaterra, en cambio, de $100 que se paga por un producto, sólo $13 son impuestos. A a su vez, los costos logísticos en la Argentina representan entre el 14% y el 30%, precisó el titular de Copal, Daniel Funes de Rioja. Por eso, si un consumidor compara los precios de un producto similar en la Argentina y en las ciudades inglesas, comprobará que en la mayoría de los casos es más barato en el exterior.
De acuerdo con un relevamiento realizado por Infobae, de una canasta de 20 productos variados –se eligieron ítems similares a nivel local–, se corroboró que si se realiza la compra en Londres, el ahorro puede llegar a superar el 50 por ciento. Mientras que en un supermercado de Manchester un consumidor gastaría en esa canasta $1.154, en Jumbo tendría que pagar $2.862 y en Carrefour, $2.170 por ese mismo conjunto de productos.
Los únicos ítems de esta lista que son más baratos en la Argentina son el pollo entero, que en los supermercados Jumbo y Carrefour locales cuestan $89,90 y $94,90, respectivamente, y en un supermercado grande de la ciudad inglesa vale 1,81 libras, equivalente a 105,90 pesos. Y las frutas y verduras, que en la Argentina se venden por kilo y en Manchester por unidad.
Por el contrario, las pastas secas, la cerveza, el yogur, la pizza, el atún al agua, el detergente, el pan lactal, el aceite de oliva, el jugo de naranja, el queso en fetas, entre otros, están más baratos en la ciudad europea que en la Argentina.
A modo de ejemplo, un paquete de pastas secas de 500 gramos que en Jumbo sale $103,69 y en Carrefour $102, en el súper de Manchester y de marca Conchiglie se consigue a 39 centavos de libra, es decir, 22,82 pesos. El litro de aceite de oliva, en tanto, sale $519 en Jumbo, $374 en Carrefour y 1,09 libras ($63,78) en Manchester. También en la pizza grande congelada hay importantes diferencias de precio: mientras que en el supermercado europeo cuesta 3,29 euros ($192,50) y en Jumbo y Carrefour, $339 y $282, respectivamente.
Otros ejemplos son: el yogur entero (pote de 150 gramos), cuyo precio en la Argentina es de $52 y $50 (en ambas cadenas) y en el súper de Manchester, de 32 centavos de libra, que equivalen a 18,72 pesos. En el caso del atún al agua, mientras que en la Argentina la lata de 170 gramos sale $109 en Jumbo y $123 en Carrefour, en la cadena del país europeo cuesta 99 centavos de libra, es decir, $57,92, pero los 120 gramos.
En el caso de las frutas, como la banana, por ejemplo, mientras que en la Argentina se consigue a $59,90 el kilo en Jumbo, y $54,90 el kilo en Carrefour, en Manchester se compra por unidad y vale 13 centavos de libras, o 7,61 pesos.
Lo mismo sucede con el morrón, que en la ciudad europea se paga la unidad 53 centavos de libra ($31,01), y en los supermercados nacionales se compra a $139,90 el kilo, en Jumbo, y a $99,90 en Carrefour. En estos casos, resulta más barato comprar en la Argentina. Sin embargo, es una excepción.
Y no sólo impacta esta diferencia de precios, sino también la de salarios entre un habitante argentino y uno que vive en Inglaterra.
Mientras que el salario promedio bruto del sector privado formal es de $38.242, equivalente a USD 850, el sueldo promedio en el país europeo asciende a USD 3.900. A su vez, mientras que el sueldo mínimo en la Argentina asciende a $12.500 mensuales, o USD 277, en Inglaterra asciende a 1.600 dólares.