La Orden 2019-71 impuesta por el secretario de Agricultura el pasado 27 de noviembre, que establece un nuevo método de pago por la producción de leche, “es un acto injusto e ilegal”, según los ganaderos que alegan que esta acción afecta de manera negativa al 70% de la industria lechera.

El reclamo es que con el nuevo sistema los ganaderos reciben pagos diferentes a pesar de que generan el mismo producto, por lo que exigen un pago único que beneficie a todos por igual. También piden que el secretario de Agricultura, Carlos Flores, no intervenga en estas decisiones que le corresponden a la Oficina de Reglamentación de la Industria lechera (ORIL), entidad que manejaba un método de pago equitativo y basado en estudios, según indicaron.

“Improvisan y van en contra de la industria lechera de Puerto Rico. Con este cambio muchos ganaderos se verán obligados a cerrar sus vaquerías en los próximos meses. Queremos un precio único. Recurrimos al tribunal y le solicitamos a la gobernadora Wanda Vázquez que intervenga”, reclamó Manuel E. Martínez, presidente del Sector de Leche de la Asociación de Agricultores.

El cambio hace que los productores de leche más pequeños obtengan pagos más altos por lo que producen, que los ganaderos más grandes, lo que crea una competencia desigual. Con el método de pago recién puesto en vigor, muchos ganaderos recurrirán a producir menos cantidad de leche para obtener mayores ganancias, lo que redundaría en una producción menor que afectaría al consumidor puertorriqueño y las posibilidades de competir con productos extranjeros derivados de la leche.

El economista y profesor Jaime del Valle, explicó en detalle cómo funciona el sistema de pagos de tres niveles que beneficia solo al 30% de los ganaderos. El pago de leche fresca fluida es el mismo para todos los ganaderos, a diferencia de la leche que se utiliza para productos derivados como el queso, que obtiene un valor diferente de acuerdo al tamaño de la producción y rendimiento.

“Los productos se pagan a precios distintos y al establecerse niveles, a los ganaderos se les paga diferente por producto, lo que es un proceso particular solo de Puerto Rico. La más reciente liquidación refleja un sistema que beneficia solo el 19% de la producción total. En el último pago unos recibieron .54 centavos por cuartillo y otros .82 centavos. Van a ahorcar la industria”, reclamó Del Valle.

El ganadero Jose Janer, añadió que hay otros factores que están afectando a la industria lechera y que los productores no tienen ni voz ni voto en las decisiones que se toman en este sector.

“Se les vende la leche a las plantas de Suiza Dairy y Tres Monjitas que manejan la leche fluida y deciden qué leche van a usar y cuánta le envían a Indulac. A los 14 días es que nos dan la liquidación y ahí es cuando sabemos con qué porcentaje la planta se queda. En el último pago se quedaron con el 35 %. Los ganaderos no decidimos en esto y los gastos operaciones no se cubren”, alegó Janer.

La Asociación de Agricultores, Sector de Leche, acudió al Tribunal y espera que el secretario de Agricultura exponga su posición antes del viernes.

“Se hizo una petición de mandamus porque la Ley 34 tiene una disposición que dice que el método de pago lo establece ORIL y no el Departamento de Agricultura; la ley no le da el poder de establecer el método de pago. Queremos que el secretario cumpla con su deber y deje sin efecto la orden”, informó el licenciado Carlos Deliz.

Oportunidad de desarrollo económico

El profesor Carlos A. Colón De Armas, presentó los patrones de consumo de leche del puertorriqueño, que indican que se está consumiendo menos leche, pero más productos derivados, por lo que identifica una oportunidad comercial que se afecta directamente con el nuevo método de pago.

“Hay un gran potencial de crecimiento. La tendencia a largo plazo ha sido el descenso en el consumo de la leche fresca fluida. En Puerto Rico hay un crecimiento en las de otras formas de leche que no son líquidas”, declaró Colón, quien informó que en la Isla se consume una amplia variedad de productos derivados de la leche al año, como el queso, yogurt, mantequilla y helado.

“El mercado está allí y con esta manera de pago se afecta la leche que se usa para estos productos que son un mercado de oportunidad”, sostuvo el economista.