Este lunes 10 de febrero ante el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación se hizo la presentación de un recurso de reconsideración de la homologación del acuerdo paritario correspondiente a 2019, por parte de la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas.
En una negociación que había comenzado en el pasado mes de mayo, que tuvo 18 encuentros paritarios y de revisión, el 18 de diciembre se firmaba el acuerdo de aumento del 57,5% en toda la escala salarial de los trabajadores lecheros, incluyendo dos puntos pendientes del acuerdo de 2018, e incluso adelantando 1,7% del aumento del costo de vida para este 2020.
En un acta complementaria Apymel sólo rechazaba el pago de otros 13 mil pesos, a cancelarse entre Febrero y Abril, que el gremio ATILRA consiguió en el último día de negociación ante el anuncio del paro, por parte del CIL.
Las pymes abonaron los salarios de noviembre sin descuento alguno y ya habían cumplido con el bono de $8.500 para la salud, educación y Bienestar gremial en agosto.
Si bien el 17 de enero la cartera de Trabajo había generado una resolución de homologación paritaria 2020-50-APN-ST#MT registrada bajo el número 225/20, fue una semana después que la reformó incorporando en la resolución 2020-91-APN-ST#MT de manera irregular e inconsulta a la empresa SanCor para terminar desconociendo la salvedad firmada ante Apymel y obligando de esta manera a pagar uniformemente a todo el sector “erga omnes” una paritaria con bonos extraordinarios a pesar de no contar con el acuerdo completo de los representantes que sí debatieron en todas las instancias.
Además de la presentación formal, la entidad que representa a las pymes lácteas le planteó de manera directa al Ministro Claudio Moroni la disconformidad, entendida por el funcionario, con la acción de sumar a SanCor como protagonista paritario, con retroactividad a lo definido en diciembre. La cooperativa que definiera en octubre de 2017 retirarse del debate salarial, ahora es sumada intempestivamente para dirimir la divergencia de criterios industriales, incluso siendo una empresa con bajo nivel de procesamiento de materia prima y pago de salarios en cuotas desde hace años. Es sabido que la exigencia de del acuerdo no tendrá el mismo impacto en la cooperativa que en el resto de las empresas.
Con un nivel de procesamiento similar a cualquiera de las pymes representadas por nuestra entidad, el Gobierno vuelve a privilegiar a una empresa que además de incumplir con los compromisos ante sus trabajadores, sigue sosteniendo una millonaria deuda con el propio Estado y con la entidad gremial.
Cabe recordar que para poder sentarse a la mesa paritaria, Apymel debió presentar notas de aceptación ante todos los protagonistas del debate salarial, ocho años atrás y sin efecto retroactivo alguno, hecho contrario al de este caso.
“Un voto irregular es lo que termina definiendo el destino de toda la paritaria sectorial”, aseguraron desde la dirigencia de Apymel. Del mismo modo se explica que “el ingreso de SanCor en estas circunstancias es de evidente daño para el sector empresarial pyme, imponiendo un costo que genera inequidad competitiva en contra de un sector debilitado por el contexto económico y que ahonda más las diferencias en envergadura y capacidad tecnológica entre las lácteas grandes y las pymes”.
Se estima que el Ministerio correrá el traslado de este reclamo administrativo al gremio y al Centro de la Industria Lechera, por lo tanto para comienzos de marzo se podría tener una definición del caso, que de no resultar favorable llegaría a cursarse en el Poder Judicial.