Buenos Aires, 30 de marzo de 2020.
La salud de nuestro personal siempre ha sido una prioridad y las medidas sanitarias, que contemplan la prevención de contagio del COVID-19, son básicas para nuestra industria (lavado de manos, uso de barbijos, etcétera).
En tiempos de crisis, hemos focalizado nuestra comunicación en alertar a nuestra gente sobre la necesidad de modificar sus hábitos fuera de la empresa tales como, evitar reuniones, cumpleaños, salir a la calle lo menos posible, tener máximo cuidado cuando uno sale a abastecerse de los productos básicos, ser cautelosos en la higiene en el hogar, entre otras medidas.
Desde la dirección de San Ignacio hemos tomado con mucha seriedad la prevención de la pandemia, dado nuestro rol de sostén de dos pueblos de la provincia de Santa Fe (Sauce Viejo e Hipatia).
Nuestra fuerza de ventas está realizando comunicaciones virtuales con sus clientes de insumos y de nuestras materias primas que son utilizadas en la industria de las golosinas, repostería y heladería.
Los mensajes a nuestra comunidad cercana también pusieron énfasis en el tono de la comunicación ya que muchos son madres o padres con hijos de distintas edades, y nuestro aporte de valor lo volcamos a instruir sobre cómo informar esta crisis de manera de sensibilizar al entorno familiar y amigos.
Además, contamos con el servicio de un médico clínico y un psicólogo dentro de la planta, con quienes hemos preparado no sólo las charlas grupales que realizamos, sino también diseñado la cartelería distribuida en todos los sectores de la empresa.
Como empresa del interior del país, el tomar mate es cultural y difícil de prohibir, pero sí de eliminar los momentos de consumo grupales por el momento. El mate se comparte y, dado que es una fuente de transmisión de enfermedades, hemos decidido entregarle un mate personalizado a cada uno de los empleados a los efectos de evitar contagios por este medio.
Además, hemos implementado un protocolo para la atención de los proveedores con un estricto sistema de control digital de temperatura al ingresar a la planta, máximo cuidado y desinfección en la recepción de insumos; igual cuidado en el despacho de nuestras materias primas y productos limitado las reuniones con personas ajenas a la empresa, guardando la distancia de 2 metros entre persona y persona. Estas acciones se extendieron a cada uno de los tambos certificados que nos abastecen.
La Industria Láctea continúa trabajando a pleno: los tambos no pueden parar su producción lechera.
Agradecemos a todos y cada uno de nuestros colaboradores que siguen trabajando sin cesar y permitiendo que nuestros productos se mantengan en las góndolas a Precios Cuidados, según pactamos con el Gobierno nacional, a pesar de la difícil situación inédita que nos toca atravesar.
Queremos cuidarte y cuidar a los integrantes de la gran familia San Ignacio.
Juntos vamos a lograr pasar este difícil momento.
Alejandro Bertin, CEO de Establecimientos San Ignacio