Según ha informado el Govern en un comunicado, la medida forma parte del plan de choque para ayudar el sector primario ante la situación generada por el estado de alarma decretado por la crisis del coronavirus.
El paquete consta principalmente de una convocatoria de ayudas de un total de 350.000 euros y tiene como objetivo “ayudar con los gastos de gestión” del producto al que no se haya podido dar salida debido al parón de la demanda desde el sector servicios.
La consellera Mae de Concha ha manifestado que se quiere “proteger a los ganaderos y las empresas de un impacto negativo en el precio que reciben”. El importe de esta convocatoria extraordinaria tendrá la posibilidad de ampliarse, con cargo a los presupuestos del Fogaiba 2020.
Según han detallado, podrán ser beneficiarios de estas ayudas extraordinarias las empresas y operadores del sector que procesen leche, propia o de otras explotaciones lecheras.
Aquí está incluido cualquier proceso, desde elaboración de leche líquida, la elaboración y maduración de queso o cualquier otro producto lácteo.
También serán beneficiarios titulares de explotaciones de vacuno de leche con contrato para venta vigente y que, a consecuencia de la crisis vean reducido el precio por litro de la leche respecto al del contrato. En todo caso, las empresas tendrán que continuar con los compromisos de recogida de leche y precio pactados en los contratos.
AYUDAS Y SUBVENCIONES DIRECTAS
La primera medida de este paquete consiste en una ayuda directa a la retirada de ganado de las granjas de leche, con más de cinco años o con lesiones o daños que afecten su productividad.
La ayuda será de 140 euros por animal y el cálculo de la ayuda total a cada explotación se realizará teniendo en cuenta la media de animales retirados por cada explotación en los últimos tres años.
La medida trata también así de “compensar un porcentaje del exceso de producción de las explotaciones”, en estos momentos de menos demanda a causa del cierre del sector servicios.
La segunda de las medidas consiste en otra ayuda directa destinada a “apoyar con los gastos corrientes” de las empresas y operadores lácteos que procesan leche propia u otras explotaciones.
Se cubre así el incremento de este tipo de gastos a consecuencia de haber incrementado el volumen de leche procesada por el hecho de absorber leche de otras empresas; por el hecho de haber introducido nuevos procesos productivos para dar salida a los stocks; y por el incremento derivado de gastos extraordinarios a consecuencia del estado de alarma.
El objetivo con estas dos medidas es garantizar el mantenimiento de todas las explotaciones de leche de Baleares y ayudar al equilibrio en el mercado.
También permiten continuar con la recogida y precio pactados en los contratos entre las empresas y las explotaciones, para que los ganaderos no se vean afectados.
En total, se calcula que se vería beneficiado un volumen máximo total de 450 toneladas de leche, que supone unas 150 toneladas mensuales durante este periodo de tiempo.
La tercera medida es una subvención directa a la renta de las explotaciones ganaderas, para cubrir posibles bajadas de los precios recibidos por la leche a causa de desequilibrios en el mercado o por causas de fuerza mayor.
De momento, todavía no se han producido y la ayuda se dará solo a aquellos que las sufran, y por tanto no hay todavía una previsión definida, pero la cuantía que se dará será de hasta 5 céntimos por litro.
La cuarta medida será comprar excedentes de producto lácteo para destinarlos a entidades sociales y colectividades públicas dadas de alta en la dirección general de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural como centros beneficiarios de ayuda alimentaria.
Esta medida se llevará a cabo con fondos procedentes de Europa por estos tipos de ayudas de emergencia. Así, se ayudará a las personas más desfavorecidas con producto de calidad, y se descongestionará el mercado lácteo. Se darán de acuerdo con los precios establecidos por esta conselleria.
Todas estas ayudas se abonarán, una vez resueltas por el Fogaiba, con efecto retroactivo desde el primer día del estado de alarma y hasta el 30 de junio.
Los beneficiarios podrán solicitar las ayudas desde el día de la publicación de estas al BOIB y hasta el 15 de julio. Las solicitudes serán seleccionadas mediante el procedimiento de concurrencia no competitiva. Esto significa que serán aceptadas todas aquellas que cumplan los requisitos de la ayuda y que presenten la documentación pertinente.