“Es de esperarse que las importaciones de queso rallado y en polvo se reduzcan en alrededor de la mitad al tener como principal destino el food service.
“Esto podría implicar una reducción en las importaciones totales de queso del 25 por ciento”, dijo René Fonseca, director general de la Cámara.
El 50 por ciento del queso que se importa es queso rallado y en polvo, agregó en el seminario “Perspectivas de los lácteos ante el Covid-19”, organizado por el Consejo Nacional de Fabricantes de Alimentos Balanceados y de la Nutrición Animal (Conafab).
México también podrá ver disminuidas sus importaciones de leche en polvo entre un 15 y un 20 por ciento para este año, algo que se reflejará hacia el segundo semestre, estimó.
“Va haber una reducción en la medida en que disminuye el consumo total de la leche en polvo importada. Quizá en un 15 o 20 por ciento”, comentó el directivo.
Tan sólo para septiembre de 2019, el volumen de compras externas de leche en polvo alcanzó 263 mil 401 toneladas por un valor de 613 mil 919 millones de dólares, de acuerdo con los últimos datos reportados por el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP).
En compra de leche en polvo desnatada México posee el primer lugar a nivel mundial, con 11.5 por ciento de las importaciones globales, siendo 9 de cada 10 toneladas importadas procedentes de Estados Unidos.
