Esta concentración en las ventas al país africano tiene como contrapartida el brusco descenso de los demás principales clientes, fundamentalmente Brasil y Rusia. El vecino del norte, que había comprado lácteos por US$ 78 millones en el primer semestre de 2019, redujo sus compras 57% a solo US$ 34 millones en el corriente. La devaluación del real y los graves problemas económicos por los que atraviesa el país, en buena medida determinados por el impacto del covid-19, contrajeron su capacidad de compra.
También se dio un descenso de 48% en las colocaciones en Rusia a US$ 22 millones.
Además de Argelia, el otro destino que elevó sus importaciones fue China, aunque en una menor proporción. La facturación por concepto de exportación de lácteos a este destino creció 25% a US$ 21 millones.
En total, las exportaciones de lácteos en el primer semestre del año fueron de US$ 260 millones, solo US$ 10 millones por debajo del mismo período de 2019.
En junio crecieron 31% interanual
Las ventas externas de productos lácteos tuvieron incidencia positiva en las exportaciones de junio de Uruguay al ubicarse en US$ 58 millones, creciendo 31% interanual. A nivel de productos, este aumento obedeció a mayores ventas de leche en polvo y de manteca. Con respecto a los destinos, las exportaciones hacia Argelia crecieron sensiblemente y ese país absorbió el 38% del total del mes de junio, informó Uruguay XXI este miércoles
También aumentaron las ventas a otros destinos como Cuba, Egipto, Marruecos y Emiratos Árabes Unidos entre otros. Sin embargo, las ventas hacia Brasil y Rusia cayeron en este lapso. En el primer semestre del año las exportaciones de productos lácteos mostraron un muy leve aumento en la comparación interanual, ubicándose en US$ 280 millones.