La revista The Economist actualizó el cálculo a julio 2020 y esta vez también usó la medición para comparar el tamaño de las economías de China y de los EEUU
Los locales de McDonald’s están cerrados en gran parte del mundo por la pandemia de coronavirus, pero eso no impidió que The Economist actualizara en su última edición el “Índice Big Mac”, que estima cuán caras (sobrevaluadas) o baratas (subvaluadas) en relación al dólar están las monedas de diferentes países tomando como referencia el precio del “Big Mac” en los locales de la cadena de los Arcos Dorados.
La revista británica empezó a hacer ese cálculo en 1986. El principio teórico es que el Big Mac sirve como aproximación al tipo de cambio en función de si su precio esté “alineado” o “desalineado”, porque se elabora y sirve de modo muy homogéneo en todos los países donde funciona la cadena.
Si al convertir a dólares el precio de un Big Mac en moneda local según el tipo de cambio vigente en un determinado país el precio resulta más caro que un Big Mac en Estados Unidos, se dice que el tipo de cambio de ese país está “sobrevaluado” (debería abaratarse hasta que el precio del Big Mac en dólares se iguale con el que tiene en EEUU). Si, en cambio, el precio en dólares resulta más barato, se dice que el tipo de cambio de ese país está “subvaluado” (debería encarecerse hasta que el precio del Big Mac en dólares sea igual al de EEUU).
Pues bien, según el “Índice Big Mac” el tipo de cambio del peso argentino está subvaluado en un 40%. La revista toma el tipo de cambio oficial, sin impuesto PAIS. Si tomara el tipo de cambio que reciben los exportadores de soja, diría que el tipo de cambio no sólo está subvaluado sino muy subvaluado, al punto que debería más que duplicarse.
Si en cambio tomara el valor del dólar blue o algunos de los tipos de cambio “alternativos” el resultado sería que el tipo de cambio está algo sobrevaluado.
Según la lista, el valor del dólar respecto del peso argentino debería estar muchísimo más cerca del “blue” que del tipo de cambio “oficial” (una “subvaluación” del 40% implica un aumento de 66% del tipo de cambio hasta llegar al “equilibrio”) y claramente por arriba del tipo de cambio “solidario”, que surge de agregar al “oficial” un impuesto del 30 poro ciento.
El termómetro Big Mac de julio 2020 marca que las monedas más sobrevaluadas del mundo son el franco suizo (ya habituado a eso) y la libra libanesa, debido a un proceso de inflación que el gobierno libanés intentó morigerar retrasando el tipo de cambiom de modo de evitar una espiral de precios aún superior (el famoso “ancla nominal” del que la Argentina tiene repetidas experiencias).
Hablemos de otra cosa
Tantos años de publicar el índice hacen que en cada edición la revista británica busque ángulos de lectura diferente. Esta vez, fue el de comparar los resultados del Big Mac con los mucho más complejos cálculos de tipo de cambio de “Paridad de Poder Adquisitivo” que realizó el Banco Mundial en 2019 y ver si a partir de estas mediciones la economía china es o no más grande (y cuánto) que la de Estados Unidos.
Las diferencias con lo que dicen las medidas nominales y oficiales son en efecto muy grandes. Según los valores del PBI y los tipos de cambio entre el yuan y el dólar, en 2019 el PBI de EEUU (USD 21,4 billones) era más de 50% superior al de China, que fue de USD 14 billones convirtiendo el cálculo del PBI en yuanes al tipo de cambio oficial del dólar.
Tomando los cálculos de ‘Paridad de Poder Adquisitivo’ del Banco Mundial, el FMI calculó que el PBI chino sobrepasó al de EEUU en 2014 y en 2019 ya lo superaba en un 27%, medición muy parecida al 21% que resulta del Índice Big Mac
Si en cambio se aplica la técnica Big Mac y se calculan los PBIs de los dos gigantes de la economía mundial al tipo de cambio cárnico “de equilibrio”, el PBI chino pasa a ser en realidad de USD 26 billones, algo más de 21% por encima del de EEUU.
Otra constatación de The Economist, siguiendo la misma lógica, es que ya hay 53 países del mundo que, si tuvieran la misma población que China, tendrían un PBI superior al de EEUU. A su vez, según los cálculos de “Paridad de Poder Adquisitivo” del Banco Mundial, el FMI calculó que e PBI chino superó al de EEUU en 2014 y en 2019 lo superaba en un 27%, medida muy similar a la que resulta del Índice Big Mac.
El artículo trae a colación un viejo cálculo de Caixin, una revista financiera, sobre el relativo encarecimiento del costo de vida en algunas ciudades chinas y otro del Banco Mundial, que -a diferencia del FMI- estimó que la economía china superó en tamaño a la norteamericana recién en 2016. En cualquier caso, concluye The Economist, así como el Big Mac fue alguna vez un símbolo del poderío económico norteamericano, ahora el “Índice Big Mac” dice a las claras que ese poderío ha sido superado.