Ganaderos de Chihuahua expresaron que si bien Liconsa se puso al corriente con el pago de las semanas 18 y 29 del año, el retraso causó que numerosos agremiados tuvieran que endeudarse e incluso recurrir a la venta de sus animales para sobrevivir.
Santos Anchondo, presidente de la Asociación de Pequeños Productores de Leche del municipio de Meoqui, explicó que este año se agudizó “como nunca” la inestabilidad e inconsistencia de las retribuciones por parte de la paraestatal, escenario que se ha mantenido como una constante a lo largo de todo el año.
Añadió que durante un periodo de 15 días los ganaderos no recibieron ningún pago por parte de Liconsa, lo que afectó a principalmente a 10 pequeños empresarios que abandonaron la actividad.
Esto sucede pese a que desde dicha agrupación de productores de leche ya habían denunciado la misma situación durante las semanas 22 y 23, en las que se tuvo adeudos con 200 agremiados.
Aseveró para el medio local El Heraldo de Chihuahua que por la falta de liquidez carecían de los recursos necesarios para alimentar a los semovientes y a sus familias, por lo que incluso han debido vender su equipo y transportes.
En este sentido, Anchondo comentó que durante dichas semanas fue el director local de Liconsa, Jesús Cañas, quien les explicó que por la falta de la disposición de los fondos necesarios por parte del Gobierno Federal, no se contaba con los medios para pagar a los productores.