Si bien las partes se acercaron, hay un punto en la negociación que se plantea como el más difícil para que se pueda cerrar la paritaria.

No se trata del monto del aumento, ni de plazos de pago. Tampoco sería un gran inconveniente el descuento del día de paro y el premio por presentismo, también se podría arreglar el pedido de una clausula gatillo para el resto del año. Lo que frena la paritaria es el financiamiento de la obra social de Atilra.
Mañana se espera una reunión clave en el Ministerio de Trabajo, será presencial, hasta el momento los encuentros venían siendo virtuales, y reunirá a dos representantes de Atilra, dos del CIL, dos de Apymel y dos de las autoridades ministeriales. La decisión de que se junten físicamente abrió la esperanza de que el acuerdo pueda firmarse y se cierre el conflicto, pero, si bien las partes se acercaron, la financiación de la Obra Social es “el tema” pendiente.
En la primera reunión Atilra hizo sus pedidos, en la segunda las cámaras hicieron su oferta salarial que fue desestimada, para la tercera reunión, la de ayer, el aumento de sueldos quedó casi cerrado ante la mejora en la forma de pago que hicieron las industrias, pero tres puntos quedaron sin resolverse.
1. El pago del día de paro y el premio por presentismo perdido por los trabajadores ante la medida de fuerza del mes pasado. Si bien hasta el momento el reclamo del gremio se sostiene y las cámaras se niegan, alguien que ha estado sentado en la mesa de negociaciones por mucho tiempo aseguró que esto se compensa por otro lado. Seguramente en los papeles quedará como que no se pagó, pero se cargarán más hora extra que compensen esa pérdida, para que en el bolsillo no se note.
2. Una clausula gatillo que se actualice mes a mes acorde al IPC. Este pedido gremial no contaría con el visto buen del gobierno, porque implica una indexación que no ayudaría a contener la inflación en los próximos meses, por lo que se especula con que se seguirá negociando como hasta ahora, con reuniones periódicas para actualizar los salarios.
3. Un retroactivo para la Obra Social por la inflación de los primeros seis meses del año. Y aquí llegamos al punto de quiebre verdadero. Desde el gremio sostienen que la demora en el inicio de la paritaria, y su consecuente retraso en la actualización salarial produjo una pérdida de ingresos a la Obra Social que debería ser compensado de forma retroactiva, con un equivalente al incremento salarial que se acuerde.
En este punto no se ha notado hasta el momento ningún tipo de avance, y tampoco se avizora una salida elegante que no deje heridos.
Este miércoles se tendrá un panorama más claro, quedan pocos días para que venza definitivamente la conciliación obligatoria que fue extendida hasta el lunes que viene al mediodía. Ese es el punto límite para acordar sin que vuelvan los conflictos activos.

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