El precio de la leche pago al productor en Brasil alcanzó un nuevo récord en setiembre.
Promedió a nivel país R$ 2,1319 por litro (aproximadamente US$ 0,378), un 9,7% por encima del mes anterior y marcó un nuevo máximo en la serie histórica del Centro de Estudios Avanzados en Economía Aplicada (Cepea) de la Universidad de San Pablo. Respecto a un año atrás la suba fue de 51%.
Además, el precio de la leche pago al productor ha registrado un aumento de 56% en el acumulado del año. La suba se explica centralmente por una mayor competencia entre las industrias lácteas por la materia prima en época de menor producción.
En ese aspecto, el Índice de Captación de Leche de Cepea registró un tímido incremento de 3,9% de julio a agosto.
Habitualmente suele darse una suba en el precio pagado al productor entre marzo y agosto, vinculado a una disminución estacional de la producción, pero este año ese descenso se vio acentuado por la falta de lluvias en el sudeste y en el centro-oeste del país.
A eso se suma un incremento en los costos de producción que ha enfrentado el sector lechero y su impacto en las inversiones, en un año de incertidumbre ante la pandemia de covid-19.
Los stocks de lácteos en Brasil han caído con una reactivación del consumo, de la mano de asistencias gubernamentales y una recuperación de las importaciones brasileñas con magro desempeño en el primer semestre.
Hacia adelante se espera un aoje en la tendencia alcista registrada en los últimos meses, en la medida que aumenta la producción con el avance de la primavera y mejoran las condiciones climáticas para la lechería.