En declaraciones radiales, la funcionaria indicó que el Gobierno lleva adelante “una serie de imputaciones a empresas por no producir a su máxima capacidad”, tras encontrar “faltantes en góndolas en productos como aceites, aderezos, arroz, lácteos, pan lactal o detergentes, entre otros”. “Este accionar tiene el objetivo de cuidar el bolsillo de todas y todos los argentinos y de ser implacables con los especuladores, como pidió el presidente“, sostuvo.
Al dar cuenta del procedimiento realizado, Paula Español explicó que se hizo “una inspección en supermercados y comercios y también en las empresas proveedoras para confirmar que no estaba habiendo un problema de producción y abastecimiento desde el lado de estas firmas”. Por último, remarcó que el hecho forma parte de “las iniciativas de controles de precios y abastecimiento que se vienen llevando adelante desde la Secretaría de Comercio Interior desde el inicio de la pandemia, con más de 34.000 inspecciones realizadas”.
Hoy, la secretaría que depende del Ministerio de Desarrollo Productivo imputó a las empresas Mastellone, Fargo, AGD, Danone, Molinos Cañuelas, Bunge, Molinos Río de la Plata, Unilever, P&G, Paladini y Potigian, por retención en sus volúmenes de producción o falta de entrega de determinados productos de consumo masivo para su comercialización.
“Las imputaciones se realizaron luego de verificar que estas empresas habrían incumplido la intimación a incrementar su producción hasta el más alto grado de su capacidad instalada y arbitrar los medios a su alcance para asegurar su transporte y distribución con el fin de satisfacer la demanda, establecida por la resolución 100/2020”, informó Comercio Interior en un comunicado.