En junio, las importaciones siguieron aumentando; se internalizaron 70,7 millones de litros (equivalentes) de leche, lo que representa un aumento del 22% respecto al mes anterior.
El aumento se debió principalmente a la baja disponibilidad de leche como materia prima en Brasil y, en consecuencia, al aumento de los precios internos. Este aumento (de los precios internos) hizo que el producto importado fuera más competitivo.
Brasil importó casi 4 mil toneladas de leche en polvo entera en junio, oras 1.346 toneladas de leche descremada y 2.240 toneladas de quesos.
Al comparar este valor con el precio spot de la primera quincena de julio (R$ 2,41/litro) y también con el precio de la leche pagado al productor en junio – cerró en un promedio de R$ 2,20 /litro (CEPEA / ESALQ) -, se concluye que la venta de leche brasileña en el exterior ya no es atractiva.
Por otro lado, “si consideramos los mismos valores para la cuenta, llegamos a un precio de la leche importada pagada en Brasil de R$ 2,37/litro, lo que probablemente podría indicar un nuevo aumento de las importaciones brasileñas en los próximos días. A pesar de esto, el mercado lácteo brasileño es dinámico y debemos estar atentos a posibles cambios en el escenario interno y externo”, consideró MilkPoint.