En noviembre de 2018, el entonces vicepresidente de la República Óscar Ortiz inauguró una planta láctea agroindustrial en el cantón Tablas El Nilo I, del municipio de Zacatecoluca. El funcionamiento de la planta fue anunciada con bombo y platillo por el ministerio de Agricultura, presidido en esa fecha por Orestes Ortez, que afirmó que beneficiaría a 1,000 productores del departamento de La Paz; sin embargo la planta nunca funcionó.
Miembros de la Central de Cooperativas Agropecuarias (CCA) de Zacatecoluca, manifestaron que la planta está varada debido a la falta de capital semilla para poderla operar. Afirmaron que la construcción de la planta tuvo una inversión de aproximadamente $1 millón, y que la CCA aportó $300,000 como contrapartida, y el resto fue proporcionado por el gobierno central.
Los miembros de la CCA aseguraron que la contrapartida que ellos tuvieron que aportar para la planta afectó sus finanzas, dejándolos sin los fondos para siquiera iniciar por su cuenta la operación de la planta.
Recordaron que tras el acto de inauguración de la planta láctea no volvieron a recibir el respaldo del gobierno, dejándolos sin la posibilidad de echar a andar la producción.
“Nos alegramos por tener esta maquinaria, pero al mismo tiempo sabemos que no podemos hacer nada con ella por no tener recursos económicos. Estamos pidiendo un capital semilla para poder iniciar, necesitamos apoyo para arrancar. La planta beneficiaría a más de 25,000 personas de manera directa, porque somos diez cooperativas ganaderas”, expresó Juan Alonso Marquez, representante legal de la CCA.
La planta agroindustrial tiene la capacidad de procesar todo tipo de lácteos: leche fresca, pasteurizada, esterilizada, quesos no maduros, crema, y además se puede embolsar agua.
Fue construida a través del Plan de Agricultura Familiar Rural para la Seguridad Alimentaria y Nutricional, y su finalidad era proporcionar a los ganaderos de la zona paracentral el equipo necesario para abastecer al gobierno de leche como parte del programa “Un vaso de leche”, que fue iniciado en la gestión del FMLN.
“Invertimos todo lo que teníamos, actualmente nos hemos quedado pagando créditos. Buscamos que nos den un crédito blando o que el gobierno nos eche la mano, esto va a beneficiar a mucha gente, la maquinaria se puede arruinar de estar guardada”, mencionó Esperanza López, tesorera de CCA.
Se intentó conocer la postura de las actuales autoridades del ministerio de Agricultura sobre la situación, o saber si tenían conocimiento de la existencia de la planta procesadora, pero no fue posible.