El informe de Ventas de Productos Lácteos en el Mercado Interno indica que se observó un volumen de ventas inferior del 7,9% en productos y 4,2% en litros de leche equivalentes respecto a igual período del año anterior.
Empresas del sector dijeron a la prensa especializada que la caída del consumo, a partir de datos generados por el Indec y la Dirección Nacional Láctea puede explicarse en parte por el menor poder adquisitivo de la población, aunque no se descarta que haya más elaboración y ventas de productos “en negro”, ya que algunos indicadores como la venta de filme para ensachetar no ha variado.
La información proviene del panel de industrias lácteas establecido a partir del relevamiento coyuntural y la información histórica exigidos por la Secretaría de Agricultura.
El estudio puntualiza que “también puede observarse una baja importante en leches fluidas y en leches en polvo y un crecimiento en casi todos los productos que presentaron fuertes bajas en 2020 como, postres, leches saborizadas, otros quesos (base muy baja de comparación), ya que con los retrasos de precios que se dieron hasta principios de año (precios máximos y precios cuidados), ha habido una recomposición de los volúmenes vendidos de esos productos que habían caído fuertemente el año pasado”.
Según operadores del mercado lácteo, en escenarios como el de la primera mitad del año donde hubo deterioro de los ingresos reales de la población por la escalada inflacionaria, proliferan las “ventas informales” que no se reflejan en las estadísticas.
En el comentario final, OCLA recomienda que “es contundente que las ventas y por ende el consumo, presentan en los últimos años una tendencia a la baja en general y una primarización del mismo (productos más básicos: leches fluidas no refrigeradas, quesos de pasta blanda y yogures bebibles de litro) en detrimento de aquellos productos de mayor valor agregado y por ende económico que obviamente afectan el mix de ventas de la cadena de valor láctea”.
Añade que “esta situación sin duda se da por un fuerte deterioro de los niveles de ingresos reales, fundamentalmente de los segmentos medios de la pirámide de ingresos, lo cual al margen de reducir el volumen de consumo, afecta el valor del mix de ventas haciendo que se facture un menor valor en las ventas internas”.