La suspensión, que es parte de un pacto de salud animal acordado entre China y Brasil y está diseñada para darle tiempo a Beijing para evaluar el problema, comienza de inmediato, dijo el ministerio.
Desde altas fuentes del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), señalaron a Tardáguila Agromercados que Uruguay actuará en base a las recomendaciones de la OIE y se convocará a un comité técnico para evaluar la situación.
La Encefalopatía Espongiforme Bovina (EEB) es una enfermedad progresiva, degenerativa, con daño neurológico generalizado, que tiene un largo período de gestación en el ganado bovino (hasta 8 a 10 años) y concluye con la muerte del animal. Fue identificada en Inglaterra en 1985 y, aunque su aparición es incierta, existe acuerdo científico en que está asociada a la alimentación del ganado con harinas de origen animal que no habrían recibido el tratamiento térmico adecuado. Dicho problema incluiría a las ovejas, las cuales sufren una enfermedad equivalente llamada “scrapie”, y también se han descripto enfermedades similares en otros rumiantes y también en felinos, en zorros y en ciertos tipos de ciervos. En estos casos se habla, en general, de Enfermedades Espongiformes de Animales (EEA).
La enfermedad es causada por un agente transmisible no convencional que es una proteína infecciosa denominada prion y se caracteriza por tener un periodo de incubación prolongado y variable en torno a los 4 ó 5 años.