“Matria es una experiencia que comenzó en el año 2014 de la Colonia Ferrari en Las Armas. Fue una experiencia de vuelta al campo, de un grupo de familias del Conurbano que se radicaron en el lugar, comenzaron a construir una comunidad con eje en la producción”, contó el dirigente del Movimiento Evita, Martín Poustis, quien es impulsor de este proyecto.
“Esa experiencia pasó por distintas etapas, de producción hortícola vinculada también a la comercialización de pollos, de miel. Finalmente, avanzado ya el proceso de organización se constituyó una cooperativa de trabajo que se llama Colonia Ferrari. A partir del nuevo Gobierno nacional se decidió encarar este proyecto más ambicioso que era la posibilidad de construir un primer tambo para producir leche agroecológica en la región”, agregó.
Poustis destacó que “esto fue inaugurado en julio de 2021 y actualmente proyectamos la construcción de un segundo tambo en el lugar. Estamos produciendo alrededor de 500 litros de leche por día y paulatinamente lo que hacemos es distribuirlo en distintos puntos de venta, principalmente en la región. Desde el momento de la inauguración nos había quedado el desafío de ver cómo garantizábamos la logística para poder empezar un esquema de comercialización en La Costa. Conseguimos el vehículo con las características necesarias para transportar este tipo de alimentos”.
Por último, hizo hincapié en que “mientras las principales empresas que comercializan leche van buscando cómo abaratar costos, acá estamos hablando de otra leche que no busca competir en precio, sino que es una leche agroecológica, donde las vacas se alimentan con pasto, estamos hablando de una producción sana. Es un producto que combina varias cuestiones, una es la vuelta al campo, otra es generar trabajo en la región y también la posibilidad de que los vecinos y vecinas accedan a estos alimentos relacionados con el cuidado de la salud”.
La realidad de las Mujeres de la Cooperativa Colonia Ferrari
Los miembros de la Cooperativa Colonia Ferrari saben de ello, lo viven a diario y juntos están armando un espacio para que maternar y trabajar en el tambo no sea abrumador. Colonia Ferrari es un espacio de trabajo dedicado al sector tambero ubicado en la localidad de Las Armas, distrito de Maipú, Provincia de Buenos Aires.
Dedican su trabajo y su tiempo a la producción de leche agroecológica y a la producción de insumos lácteos. En la línea de producción trabajan en su mayoría mujeres que son las encargadas del cuidado y abastecimiento en las guacheras (lugar donde se encuentran los terneros), la producción y elaboración de masas para muzzarella. “Estamos bastante organizadas, hay compañeras que se encargan de la cocina, compañeras que se encargan de la limpieza, las cuidadoras de niños, en la guachera yo trabajo junto a una compañera y en el ordeñe del tambo hay una pareja trabajando”, cuenta Judith Ramoa trabajadora de la Cooperativa Colonia Ferrari.
“Nosotras nos encargamos de llevar a delante todo lo que es la producción, desde que llega la leche al tambo, recibirla y decidir qué hacer con ella. La mayoría de mujeres que trabajamos acá, sufrimos algún tipo de violencia, y somos mujeres solas con nuestros hijos /hijas llevando adelante la producción y también sacando adelante nuestra casa”, relata Judith quien encontró en el trabajo el lugar para consolidarse y fortalecerse.
La época de recesión escolar, la temporada vacacional y veraniega es la más esperada por los niños, pero a su vez representa la temporada de mayor incertidumbre para los trabajadores que deben continuar con sus actividades diarias y la vez estar pendiente del cuidado de los niños.
Por ello en la Cooperativa Ferrari y pensando en dar respuesta a las madres y padres frente a esta circunstancia es que dieron inicio al proyecto de una escuela de verano. “Tenemos una escuelita chiquita, funciona los miércoles y viernes hay compañeras que ahí se encargan del cuidado y contención de la niñez.
La escuelita surge con el programa Potenciar Trabajo, nosotros inscribimos a compañeras para capacitarse y hoy están a cargo de deportes, de música, de danza como también para el apoyo escolar. Todo pensando en la necesidad de los nenes de estar acompañados en nuestro horario de trabajo, como nosotros desde las ocho de la mañana hasta las seis de la tarde no volvemos a casa, por el trabajo que nos lleva en la Colonia, ellas a partir de ese momento se hacen cargo de los nenes y nenas, es un espacio que funciona dentro de la colonia y ahí pasan el día”, detalla la trabajadora.
El resto de los días es pura organización de las trabajadoras y los trabajadores, se arman grupos de niños que van rotando por diferentes casas donde se encargan de su cuidado durante el tiempo que dure la jornada laboral “los martes me toca a mí, entonces los nenes vienen a mi casa y se quedan acá, otro día van a la casa de otra compañera y así nos vamos cubriendo, más allá que acá no pasa nada, hay que cuidar bien de los nenes igual” cuenta Judith.
Esta es la dinámica de la Cooperativa durante la época vacacional, durante el año los nenes van a la escuela en una combi, los pasan a buscar por la tranquera y se van a Las Armas a la escuela.
El trabajo organizado para producir Matria
En el tambo el trabajo también se encuentra organizado, “tenemos nuestros roles definidos, cada uno ya sabe lo que tiene que hacer: los que se encargan del ordeñe, las franqueras que una vez por semana se encargan del tambo, los de la guachera que durante la mañana y la tarde que se encargan de darle leche a los terneros y atenderlos, las compañeras de la masería reciben la leche y elaboran masa ya que hoy nosotros estamos haciendo masa para muzzarella también” explica Judith.
La cooperativa tiene un equipo de veterinarios que se encargan del cuidado de los animales, hay un grupo de sanidad, pastoreo y alimentación, siembras de pasturas libres de químicos para alimentar las vacas y equipo completo dedicado al cuidado de la vaca.