El presidente estadounidense, Joe Biden, dio a conocer este lunes la pronta realización de su 17ª misión ‘Operation Fly Formula’, en momentos en que la escasez de fórmula para bebés empeora en todo el país.
La Administración de Biden anunció dos vuelos facilitados por el Departamento de Salud y Servicios Humanos de los EE.UU. (HHS, por sus siglas en inglés) para transportar la fórmula de Nestlé Health Science, a base de aminoácidos, desde Suiza al aeropuerto John F. Kennedy, en Nueva York, el 21 y 22 de julio.
La entrega incluirá el equivalente a 802.446 botellas de fórmula de 8 onzas, que “se distribuirán principalmente a hospitales y proveedores de atención médica domiciliaria”. Entre tanto, las tiendas estadounidenses todavía tienen dificultades para ofrecer el producto en sus estantes.
Según la firma de investigación de mercado IRI, la disponibilidad de la fórmula cayó a su nivel más bajo en lo que va del año, con existencias de solo 70 % para la semana que finalizó el 3 de julio, frente a 77 % en la semana del 5 de junio, recoge Bloomberg.
IRI rastrea el inventario del producto en más de 125.000 supermercados y farmacias del país norteamericano. Las existencias rondaban el 90 % en febrero, antes del cierre de la fábrica de Abbott Laboratories y su retiro del mercado.
Según IRI, los estados más afectados, con niveles de inventario por debajo de 60 %, incluyen Utah, Wyoming, Kansas, Colorado y Alaska encabezando la lista, con un promedio de existencias del 51 %, mientras que Nueva York, con 81 %, es el estado con la mejor situación de suministro.
El mandatario estadounidense lanzó la ‘Operation Fly Formula’ “para acelerar la importación de fórmula infantil y comenzar a llevar más fórmula a las tiendas lo antes posible”, señaló la Casa Blanca al estimar que para el 24 de julio se habrá transportado a EE.UU. el equivalente a más de 61 millones de botellas de 8 onzas de este indispensable alimento.
La escasez se desató en febrero cuando Abbott Nutrition, responsable de producir aproximadamente una quinta parte de la fórmula en EE.UU., cerró su planta en Sturgis, Michigan, después que la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) iniciara una investigación sobre cuatro infecciones bacterianas entre niños que consumieron leche de ese tipo producida en sus instalaciones.
Abbott reinició sus operaciones en junio. Sin embargo, dos semanas después volvió a cerrar, debido a una inundación provocada por fuertes tormentas. Reabrió por segunda vez el 1 de julio, e informó que necesitaría de seis a ocho semanas a partir de la reapertura para que los productos llegaran a los estantes.