El tema vuelve a estar en el escenario después de que Nestlé se asociara con Perfect Day, una compañía que elabora leche en tanques de fermentación a escala industrial, logrando reproducir todos los componentes de la leche de vaca tradicional, para empezar a trabajar en la comercialización a gran escala de diversos productos elaborados con leche sintética de vaca.
Esta iniciativa responde a los últimos estudios de mercado elaborados por Nestlé, que señalan que existe una necesidad creciente entre los consumidores de productos que conserven todo su sabor y propiedades, pero que sean respetuosos con el medio ambiente. Por tanto, en el caso de la leche de vaca y sus derivados, es fundamental desarrollar tecnologías emergentes que permitan crear proteínas lácteas sin ningún tipo de intervención animal, un ámbito en el que trabaja desde hace años tanto Perfect Day (que ya cuenta con diversos tipos de helado, postres lácteos y leches que se comercializan en diversos puntos de Estados Unidos) como otras compañías.
En España, la start-up Real Deal Milk también trabaja desde hace algo más de un año en la creación de “lácteos sostenibles”, según explica su CEO y fundador Zoltan Toth-Czifra, quien indica que ya existen tecnologías bioquímicas que permiten crear las mismas proteínas de la leche de vaca de forma sostenible a partir de la fermentación controlada de determinados microorganismos, sin limitar el sabor y las propiedades físicas de los lácteos..
Añade que, “si hacemos una estimación realista, en mi opinión necesitaremos la década de los 20 (2020 a 2030) para poder producir leche y derivados en grandes cantidades y tal vez en unos cuantos años, teniendo en cuenta que la Unión Europea tarda un tiempo en aprobar su comercialización, se podría disponer de estos productos de forma habitual en los supermercados”.
Pese a que todavía es pronto, el reciente acuerdo entre Nestlé y Perfect Day podría contradecir esta afirmación, ya que Nestlé pretende lanzar estas leches al mercado a finales de este año con el propósito de testarlas entre los consumidores, valorando si es realmente una oportunidad para la compañía. Con este fin, desde Nestlé ya se trabaja, a través de su departamento de I+D, en su producción y comercialización a gran escala si la respuesta de los consumidores a este primer lanzamiento es positiva.
No obstante, desde el pasado verano el público estadounidense ya puede comprar leche sintética en algunos establecimientos, fruto de la colaboración entre Perfect Day y Betterland Foods. “Es increíble que finalmente podamos ofrecer un producto que los consumidores nos han estado pidiendo desde el primer día, y brindarle al mundo otra forma de disfrutar la leche que hemos amado durante literalmente miles de años, ahora con mucho menos impacto en el planeta”, explica Ryan Pandya, cofundador y director ejecutivo de Perfect Day, una compañía que desde hace años también comercializa otros productos que incluyen un porcentaje de proteína sintética como helados, postres lácteos o pasteles.
Desde Perfect Day sostienen que las ventajas medioambientales de consumir lácteos sintéticos son rotundas. “La producción de leche de vaca sintética, a partir de la fermentación de microorganismos, supone una reducción de hasta el 97 % en gases de efecto invernadero, un 99 % menos de agua y un 60 % menos de uso de energías no renovables”.