Los productos lácteos han tenido una fuerte recuperación en 2021 y lograron alcanzar a Alimentos y Bebidas (incluso lo superaron en algunos meses), respecto al cual traían un importante retraso en el último trimestre de 2020 y el arranque de 2021.
Ya a fines de ese año y en todo 2022 la variación de precios de Alimentos y Bebidas se comienza a ubicar por encima de la variación de precios de los productos lácteos, manteniéndose hasta abril de 2023. Pero en mayo los lácteos superan en incremento a su categoría.
Si se comparan los precios de los lácteos del índice de precios minoristas (con datos de Gran Buenos Aires, ya que no hay un índice lácteo minorista nacional), que presentaron a mayo de 2023 una suba interanual del 133,7%, se observa que los precios mayoristas de los lácteos están 24,7 puntos porcentuales por debajo. Y si se hace con los precios de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la diferencia es de 9,4 puntos por debajo. Eso marca una brecha entre los primeros eslabones de la cadena y lo que paga el consumidor.