Hace 34 años nacía Asoleche, un gremio que agrupa y representa a las principales industrias procesadoras de la leche y sus derivados. Desde entonces, uno de sus mayores objetivos es la formalización del mercado, asegurando la calidad e inocuidad del producto y respondiendo a una nutrición con seguridad. Andrea González, su presidenta ejecutiva, habló con Agronegocios de la actualidad del sector y los logros obtenidos en más de tres décadas de trabajo.

¿De cuánto fue el acopio durante el año pasado?

Al año se están produciendo más de 7.000 millones de litros de leche. A nivel formal, el acopio, que es registrado ante el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, reúne cerca de 50% de esa cifra, y el otro 50% se da a través de la comercialización informal, es decir, que no reporta los precios de venta.

¿Por qué golpea al sector la informalidad en el negocio?

Esta situación de la informalidad afecta al negocio de la cadena láctea, como también a todos los sectores que la tienen como parte del mercado, porque no le permite dar una estabilidad al mismo. Los que formalmente compramos leche al proveedor, estamos pagando un precio regulado que determina y actualiza el MinAgricultura. En la informalidad el precio lo determina la circunstancia.

Todo esto genera inestabilidad y ayuda a que la volatilidad sea más alta. El gremio busca trabajar por transformar esa informalidad en esquemas formales que les ayuden a todos al interior de la cadena láctea.

¿Cómo va el sector en términos de internacionalización?

Los procesos de internacionalización y de promoción al consumo, son fundamentales para consolidar la industria de la leche como potencia agroalimentaria del país. Si nosotros logramos crecer, mantener y consolidar un mercado nacional e internacional, estaremos brindando oportunidades de nutrición a los colombianos.

¿Cuáles son los mayores logros en comercio internacional?

Asoleche es determinante en la potenciación del mercado nacional e internacional, logramos expandir la comercialización a los países contiguos de Centroamérica como Cuba, República Dominicana o Venezuela.

Hemos podido certificar este año para dos mercados; en el primero, un total de 17 plantas, y en el segundo, 18. Muchas de ellas han podido hacer sus exportaciones a los vecinos países. Esperamos que estas aperturas vayan creciendo y nos sirvan de ejemplo para otros mercados que tenemos en el radar.

¿Cuáles son los mayores retos del sector en el corto plazo?

La informalidad, conjuntamente con las brechas en el consumo, inseguridad alimentaria, inflación, volatilidad del mercado, entre otros aspectos, han llevado a que la industria láctea se enfrente a un 2023 con caídas de sus principales indicadores de comercialización.

La brecha de consumo entre la recomendación internacional de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), frente a lo que actualmente como colombianos consumimos, tiene un potencial de ser cerrado. Lo que significa, en términos de consumo aparente, pasar de 148 litros per cápita a 170 litros per cápita.

¿Cuál es el rol de Asoleche para aportar a la seguridad alimentaria?

En torno a la seguridad alimentaria, Asoleche le apuesta a fortalecer la política a través de la producción de derivados lácteos saludables y nutritivos, pero también llegar a los hogares que no tienen la capacidad de comprarlo, a través de un trabajo articulado entre entidades públicas y privadas.

Nosotros obtuvimos los resultados de inseguridad alimentaria leve y moderado. Desafortunadamente, es un flagelo que afecta a 15,5 millones de hogares de colombianos que no tienen platos nutritivos suficientes que ayuden con su salud y con su bienestar.

¿Cómo los ha afectado fenómenos como La Niña, que duró más de 30 meses, y El Niño, que estará los próximos años?

Al igual que en la mayoría de los productos agropecuarios, el impacto del clima tiene efecto sobre la producción. Esas condiciones afectan precios, comercialización, distribución, etc., por lo que se debe buscar tener una menor volatilidad en el mercado, que permita tener más posibilidades de planear y tomar decisiones de inversión.

¿Qué tanto inciden las crisis de infraestructura y orden público que atraviesa el país?

La infraestructura y el orden público son factores importantes en la cadena de producción láctea. La crisis en los territorios del suroccidente colombiano y en particular Cauca y Nariño, por cuenta del derrumbe de la Vía Panamericana, afecta directamente la cadena láctea e impacta a productores, procesadores, comercializadores y al consumidor.

La inflación y los costos de producción perjudican de manera latente tanto el ingreso de los hogares como la cadena de producción. Lo que busca Asoleche es llegar con precios considerables que permitan la adquisición de productos a la mayor parte la población, a través de la ciencia, tecnología e innovación, liderando así, una transformación sostenible para la cadena.

Trabajar todos conjuntamente es muy importante. Los actores públicos y privados deben articular esfuerzos, unir recursos para que podamos transformar no solamente a las comunidades o productores que tienen que ver con el eslabón primario, sino también con fortalecer la presencia del producto a nivel de los hogares.