Los cupos surgen del Acuerdo de Complementación Económica (ACE) 59 firmado en 2004 entre los países del Mercosur y los de la Comunidad Andina, que también establece cuotas para golosinas y carnes.
El cupo anual fijado para el país es de 2.268 toneladas, y abarca tanto a la leche como a la crema.
En esta oportunidad, se presentaron 15 postulantes para acceder a una licencia de exportación, uno más que para el cupo de 2023.
Tras anotarse, la Secretaría verificó el estado de las matrículas de los postulantes, la inscripción de los mismos en el Registro Único de Operadores de la Cadena Agroindustrial (Ruca) y que cuenten con las habilitaciones sanitarias correspondientes del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa).
Estos últimos requisitos sanitarios no fueron cumplidos por dos firmas, por lo que sus solicitudes fueron desestimadas.
Asimismo, se consideró como un único cupo a dos empresas que presentaron solicitudes por separado (La Varense y Punta del Agua) al verificarse que ambas tienen una vinculación legal a través de las personas humanas que confirman el directorio de la firma Intelac.
De esta forma, de las 2.268 toneladas, 1.925 fueron distribuidas en partes iguales (192,5 toneladas) a las empresas Noal, Fábrica de Alimentos Santa Clara, Gloria Argentina, Cremigal, La Sibila, L3N, Lactear, Molfino Hermanos, Mastellone, y Nestlé.
En tanto, las 192,5 toneladas correspondientes a Intelac fueron divididas en partes iguales para La Varense y Punta del Agua (96,2 toneladas), mientras que a la firma Peiretti se le asignó 150 toneladas pues pidió una cuota menor a la asignación prevista para este ciclo comercial.
Este año, en contraste con 2023, los cupos se distribuyeron en su totalidad y no se reservó un remanente para conformar un Fondo de Libre Disponibilidad para aquellos adjudicatarios que hubieren agotado el total de sus cuotas.
Fuente: Télam.