En el sector lácteo y en toda la agricultura, el estribillo que se repite a menudo es que éste será el año de la proteína

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En el sector lácteo y en toda la agricultura, el estribillo que se repetirá a menudo es que éste será el año de la proteína. De hecho, puede ser el primero de muchos: En la próxima década, la oferta mundial de proteínas animales -carne de vacuno, porcino, aves de corral y productos lácteos- no estará ni de lejos a la altura de la demanda.

Eso significa que el énfasis de los productos lácteos estadounidenses en las exportaciones y nuestra competitividad internacional serán sin duda un área de atención. Los productores lácteos y sus cooperativas están muy bien situados para ello: Somos eficientes, podemos llevar productos de alta calidad al extranjero de forma competitiva y nuestra capacidad de procesamiento se está expandiendo. Nuestra innovación y tecnología en la industria láctea para ampliar los mercados internacionales es insuperable. La NMPF puede apoyar estos esfuerzos continuando nuestra excelente colaboración con el U.S. Dairy Export Council y buscando una política sólida que promueva el potencial de la industria láctea estadounidense.

Nuestro programa Cooperatives Working Together pronto estará en condiciones de aportar recursos significativamente mayores para apoyar el crecimiento del mercado de los productos lácteos estadounidenses en todo el mundo, justo cuando nuestros principales competidores de Nueva Zelanda y Europa den un paso atrás, en gran parte debido a las limitaciones normativas que nosotros en Estados Unidos hemos podido evitar.

También tenemos margen para hacer crecer nuestra industria aumentando la demanda de proteínas en casa. Para lograrlo, es fundamental centrarse en la próxima generación. La Cámara de Representantes dio un paso importante para impulsar el consumo de leche en la próxima generación al aprobar la Ley de Leche Entera para Niños Sanos, que devolvería la leche entera y al 2% a los menús de los almuerzos escolares.

La votación fue de 330-99, lo que nos hace albergar grandes esperanzas en el Senado este año. Mientras tanto, sabemos que la ciencia detrás de los beneficios para la salud de los productos lácteos en todas sus composiciones es cada vez más convincente – y eso nos pone en una gran posición cuando el Comité de Guías Alimentarias para los Estadounidenses se reúne para elaborar nuevas normas de nutrición que guían los programas federales.

Más demanda de proteínas lácteas y mejor salud, en Estados Unidos y en todo el mundo. Si esto no basta para ilusionar al sector de cara al futuro, no sé qué podría hacerlo.

Otro tema crucial para este año es la gestión de riesgos. La audiencia sobre la Orden Federal de Comercialización de la Leche del USDA ha sido dolorosamente lenta, pero es increíblemente importante para los productores lácteos estadounidenses. Nuestro plan de juego NMPF y el esfuerzo del equipo ha sido excepcional hasta ahora, y vamos a seguir la audiencia hasta su conclusión. Estaremos preparados para responder según sea necesario a cualquier propuesta del USDA y garantizar que el camino a seguir sea el mejor para los productos lácteos.

También está prevista una nueva Ley Agrícola. Esta vez nos sentimos cómodos con la estructura fundamental de la red de seguridad láctea, pero siempre hay mejoras que hacer, y buscaremos oportunidades de cambio positivo siempre que estén disponibles.

Por supuesto, la política federal incluye mucho más que la Ley Agraria. Estamos muy contentos de ver la evolución de la regulación de los gases de efecto invernadero y los mercados de carbono en formas que beneficien a los productores de leche. Estamos presionando para que se aprueben más rápidamente los aditivos para piensos que reducen las emisiones de metano y nos sitúan en la senda de la mejora constante de nuestra huella medioambiental. Nos entusiasma ver cómo miles de millones de dólares de capital de inversión y nuevas tecnologías e innovaciones fluyen hacia el sector lácteo, porque no son sólo los ganaderos quienes creen en el futuro de esta industria: son algunas de las mentes más brillantes y los inversores más inteligentes del mundo.

Éstas son sólo algunas de las oportunidades más inmediatas que podemos afrontar. Si miramos sólo un poco más allá de 2024, tendremos que abordar de nuevo la política fiscal y cómo podemos estimular la inversión y el crecimiento en toda la agricultura y la América rural. A esto hay que añadir las luchas en curso a largo plazo, en las que el progreso es lento, pero real. El sector lácteo está reduciendo la cuota de mercado de las bebidas lácteas de origen vegetal y avanzando con la FDA en la restricción del uso de términos lácteos. Nuestro programa FARM sigue siendo un programa de garantía al cliente líder en el mundo que protege a esta industria de las afirmaciones tremendamente inexactas de nuestros detractores y competidores.

Como nuevo presidente y director general de la NMPF, tengo el deber de defender esta industria. Y gracias al liderazgo de nuestros agricultores y cooperativas y a nuestro personal de primera clase, la defendemos bien. Pero 2024 también es emocionante por el gran potencial que tenemos en el sector lácteo para tomar la iniciativa. Podemos tanto atacar como defender: va a ser un gran año para esta industria.

Por Gregg Doud, presidente y director general de la Federación Nacional de Productores de Leche

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