Un trabajo del IICA muestra cómo ha aprovechado el sector lácteo centroamericano los acuerdos internacionales y los desafíos que tiene para seguir creciendo
"La experiencia del sector lácteo centroamericanos con los acuerdos comerciales sirven a Colombia como experiencia."

El sector lácteo centroamericano está llamado a incrementar el comercio más allá de esta región y aprovechar aún más los acuerdos comerciales para alcanzar nuevos mercados de exportación, advierte un informe del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA).

El trabajo muestra una radiografía de la situación de los acuerdos comerciales y sus compromisos en la región, el grado de liberalización comercial alcanzado y las acciones que los países han logrado en cuanto a su administración y, en particular, el aprovechamiento de las oportunidades que estos acuerdos significan, todo lo cual puede ayudar a los lecheros colombianos para ampliar sus mercados.

El informe destaca una serie de retos que afronta la industria láctea en términos de sostenibilidad social, ambiental y económica, con el fin de promover el comercio internacional en la región.

Los mayores destinos de las exportaciones lácteas centroamericanas son Estados Unidos y República Dominicana, señala el documento, pero existe el desafío de potenciar más el comercio extrarregional, pues el principal destino de las exportaciones es el propio mercado intrarregional, con una participación del 78 % de las ventas totales.

También plantea que a nivel de servicios básicos es prioritario contar con avances en infraestructura vial adecuada, electrificación rural, conectividad y mayor cobertura de asistencia técnica, con lo que se podría incrementar la productividad, la rentabilidad y la modernización de los procesos productivos. En la región centroamericana, el sector lácteo se sostiene en más de 245 000 productores, en su mayoría pequeños.

Se expone que es crucial facilitar el acceso a crédito de estas personas para inversiones en áreas como producción, comercialización, procesamiento y transporte refrigerado, que actualmente limitan el desarrollo del sector.

Ampliar los mercados

Centroamérica produce anualmente 3.189,7 millones de litros de leche, divididos entre los sectores formal e informal. Precisamente, el mercado informal representa un desafío, ya que ha logrado alcanzar un 55 % de la producción de la leche de la región, en la que existen cerca de 3.500 procesadoras artesanales que elaboran, en su mayoría, productos con bajos estándares de calidad destinados al mercado local, con escasa o nula vigilancia de las autoridades competentes.

Pese a estos retos, las exportaciones de productos lácteos alcanzaron en 2021 los USD 458 millones, siendo Nicaragua y Costa Rica los principales países exportadores, con América Latina, el Caribe y América del Norte como destinos fundamentales.

El informe concluye que es necesario fortalecer las competencias y capacidades organizativas y negociadoras de los productores, de manera que puedan tener acceso a los cambios tecnológicos, la educación y la innovación, para así aprovechar mejor las oportunidades que se generan en los mercados internacionales.

“Se aborda la importancia de promover el consumo interno de productos lácteos, que aún no alcanza el nivel promedio recomendado, y se resalta la necesidad de políticas públicas que fomenten el sector, así como de enfrentar la comercialización de imitaciones y sucedáneos, un problema que impacta al consumidor y al desarrollo de la industria en la región”, indicó la especialista Alejandra Díaz.

El informe ahonda en el papel de las organizaciones en la mejora de la gobernanza sectorial, la necesidad de una mejor coordinación entre ministerios y secretarías, y la importancia de fortalecer las políticas públicas para equilibrar la productividad del mercado y las demandas de los productores y empresarios.

En materia de adaptación al cambio climático, se plasma que el sector lácteo requiere diseñar e implementar estrategias para enfrentarlo, producir mejores forrajes y, en general, elevar la competitividad; de ahí que el conocimiento, la investigación, la transferencia de tecnología, la capacitación, la asistencia técnica y las alianzas público-privadas son claves para facilitar el desarrollo de sistemas de producción eficientes, rentables y sostenibles.

El documento aboga por la disponibilidad de información y estadísticas, ya que este sector carece de datos precisos y actualizados, lo que impide la medición y el análisis de variables críticas para su desarrollo.

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