“Probablemente no será un año de precios récord desde cualquier punto de vista, pero los productores de todo el mundo acogerán con agrado el regreso a la rentabilidad”, dijo el banco especializado en materias primas Rabobank en su reporte trimestral Global dairy quarterly Q1 2024: Finding a new equilibrium, publicado a comienzos de este mes.
Los márgenes se inclinan ampliamente hacia el fortalecimiento de la producción y el aumento de las importaciones de productos lácteos de China. Según Rabobank, los productores de leche en la mayoría de los principales países productores mundiales podrán volver a la rentabilidad, con previsión de precios más altos de la leche al productor, menores costos de los insumos y el aumento de los precios de los productos lácteos que podría darse en este 2024 y principios de 2025.
Se prevé que la oferta de leche en los 7 grandes (UE, EEUU, China, Brasil, Argentina, Nueva Zelanda y Australia) se vuelva positivo en la segunda mitad de 2024, aunque el banco advierte que la expansión de la producción “llevará tiempo”.
Para Brasil, Rabobank proyecta mejores márgenes a medida que avanza el año, una creciente demanda de lácteos por parte de los consumidores y costos de producción favorables con menores costos de alimentación. La producción aumentará un 0,5% por encima de los niveles de 2023, estimó el banco.
En Argentina, los precios de la leche al productor ya están empezando a subir y un clima más favorable podría ayudar a que la producción de leche se recupere a partir del segundo trimestre de 2024. Sin embargo, la industria láctea del país sigue atravesando “un doloroso período de transición”.
¿Qué pasará con el precio al productor?
Los precios de la leche al productor están a punto de recuperarse en todas las regiones, señaló Rabobank.
En EEUU las exportaciones volverían a tener dificultades para superar los máximos históricos observados en 2022, y la demanda mundial seguiría siendo más débil. El pronóstico de Rabobank para el crecimiento de la producción de leche es del 0,5%, levemente inferior al 0,7% del USDA.
En el caso de Australia, registrará una fuerte oferta de leche y se prevé que termine la temporada con un aumento del 2,6%, con un crecimiento para 2024/25 en el rango del 3-4%.
Para Nueva Zelanda Rabobank proyecta que la producción de final de temporada disminuya un 0,7%. Sin embargo, se espera que la nueva temporada comience mejor.
¿Qué pasa con China? Las débiles perspectivas económicas de China podrían frenar el crecimiento del consumo de lácteos, aunque Rabobank espera una mejora continua en el equilibrio entre oferta y demanda, con stocks más bajos que en 2023. En cuanto a la producción de leche, se estima un crecimiento interanual del 2% y una desaceleración en el primer semestre de 2025 con márgenes débiles a negativos.
En cuanto a las importaciones, el banco prevé un crecimiento interanual del 1,1%, incluida una mejora del 6% en las importaciones de leche entera en polvo hasta 460.000 toneladas debido al acceso libre de aranceles de Nueva Zelanda y al efecto de baja de 2023.