Los amantes del queso deben estar ojo avizor a la hora de comprar uno. Últimamente se han dado, algunas personas, a la tarea de vender –metiendo gato por libre- quesos falsos y adulterados.
En redes sociales hay quienes lamentan, enormemente, haber caído en el “fraude del queso falso”.
El doctor Francisco Rosero, endocrinólogo, afirma que el queso es un superalimento, que aporta proteína, calcio y probióticos.
Explica que el queso es diferente a la leche. (…) “El queso es naturalmente es muy bajo en lactosa o azúcares”.
Cómo diferenciar un queso falso y un queso adulterado
Por ser buen alimento, lamentablemente, “también se ha adulterado el queso, se ha falsificado y nos han hecho creer que muchos productos industrializados pueden ser queso y eso es totalmente falso”.
En el mercado, para que lo tenga presente, encontrará posiblemente queso falso, queso adulterado y queso verdadero.
¿Cómo reconocer el verdadero?
Apariencia. Los quesos falsos “lucen sospechosamente” lisos, planos y perfectos, casi como plástico, describe Contexto Ganadero.
Los adulterados, aunque menos perfectos que las falsificaciones, también exhiben una apariencia demasiado uniforme y sintética.
El queso falso suele ser muy homogéneo. Su forma es muy plana, muy lisa, sintética. Se ve “muy perfecto”, dice Rosero.
Al queso sintético “le suelen agregar aromas para que huela a queso y el olor es muy fuerte”.
El queso adulterado, en cambio, “en apariencia no luce tan perfecto, pero sigue siendo muy liso, muy normal”.
Mientras que el queso real es más imperfecto, más heterogéneo, tiene incluso hasta perforaciones. Es artesanal.
El queso auténtico no se anda por las ramas… huele a queso, a leche. No es un olor tan fuerte.
Si lleva a calentar el queso falso o adulterado “se vuelve como una superficie plástico”.
Si usted gratina un queso real queda chicloso.
Si calienta un queso verdadero, este se gratina formando una superficie lisa y chiclosa, mientras que los adulterados pueden tener una textura arenosa y poco apetitosa.
Contexto Ganadero
Lea la lista de ingredientes
Los quesos artificiales son elaborados con ingredientes que suelen ser grasas, sólidos lácteos, almidones, sales fundentes, etc, señalan en Hoxe Queixos.
Anotan que si al comprar observa en el etiquetado que uno de los ingredientes es el queso, “evidentemente, eso no es queso”.
El falso es una mezcla de aceites vegetales, colorantes, almidones… no aparece la leche. Notará que es pura grasa vegetal con colorantes, añade Rosero.
Comer este tipo de queso a diario protege tu corazón de enfermedades cardiovasculares y no engorda
Al queso adulterado le suelen agregar almidones, mantequillas, saborizantes, margarinas, colorantes, conservantes, sueros, cremas y tantas cosas que no debería tener un queso bien hecho.
El queso real solo debe tener: “sal, leche y cuajo”. Puede tener cloruro de calcio, como estabilizante, y cultivos probióticos, pero no más, advierten los expertos.
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