Chile será sede de la próxima Cumbre Mundial de la Leche, encuentro organizado por la Federación Internacional (International Dairy Federation o IDF, por sus siglas en inglés) y que se realizará en Santiago, durante octubre de 2025.
La última versión de la cita, efectuada en Francia y recién concluida contó Con la participación de 1.600 expertos de más de 60 países y culminó con la firma de una declaración sobre sustentabilidad láctea llamado “Declaración de París”, y que sucede a un anterior documento emitido en 2016 en Rotterdam, Holanda, también suscrito por el Gobierno de nuestro país.
Entre otros aspectos, el acuerdo -promovido por la IDF y la División de Producción y Salud Animal de la FAO– reconoce el llamado de la ONU para acelerar la transformación de los sistemas alimentarios como un factor clave para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030.
Se estima que 130 millones de granjas en todo el planeta, que emplean a mil millones de personas, serán responsables en este siglo de alimentar a miles de millones de seres humanos en los cinco continentes, según el documento. Chile es uno de los países con avances más significativos en la materia, impulsando acuerdos de producción limpia y la certificación de sustentabilidad adscritos por sus principales actores de la cadena.
Chile recibe las llaves de la Cumbre
De esta forma, será la primera nación sudamericana en acoger el mayor encuentro de la industria láctea global, un sector que, de acuerdo a Naciones Unidas y su Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO), tendrá un rol esencial en la erradicación del hambre y los sistemas alimentarios en la era de la crisis climática. Todo esto en un contexto desafiante, con el retroceso experimentado en ámbitos como la desnutrición infantil a escala global.
La subsecretaria de Agricultura, Ignacia Fernández, quien representó al Gobierno de Chile durante la firma de la declaración, expresó que la organización de la próxima cumbre mundial va en la línea del compromiso país de avanzar en la sustentabilidad del sector agropecuario, especialmente en el ámbito lechero gracias al programa Chile Origen Consciente.
La autoridad remarcó que la colaboración público-privada ha sido fundamental para “el crecimiento e innovación de un sector que aporta fuertemente a la actividad económica del país y también a la seguridad alimentaria y a la nutrición. Nuestra apuesta por la seguridad alimentaria es por el acceso a alimentos nutritivos y saludables, ciertamente el sector lácteo juega un rol fundamental en eso”.
“Poder organizar una Cumbre en Chile es una invitación a otros países de América Latina a sumarse a este tipo de foros, dar más flexibilidad y promocionar de mejor forma lo que representa el sector lácteo en nuestro país”, enfatizó Fernández en el cierre de la cumbre 2024 y que supuso la presentación de Santiago como la capital que recibirá la comitiva en 2025.
La delegación nacional, compuesta por 18 representantes de entes sectoriales, empresas privadas e instituciones públicas, recibió de manos de las autoridades de la Federación Internacional de la Leche la llave que en forma simbólica da el pase para la próxima edición de la cita, que se realizará entre el 20 y 25 de octubre de 2025 en Chile.
Sergio Niklitschek, presidente del Consorcio Lechero, subrayó que la industria local “tendrá la enorme responsabilidad y el compromiso de ser anfitriones de un congreso mundial que tiene un estándar altísimo de calidad y que tenemos que mantener. Tenemos la expectativa de realizar un evento de clase mundial como hemos visto este año en Francia y el año anterior en Estados Unidos”.
En esta última versión, Chile obtuvo además reconocimientos por los trabajos de investigación científica formulados acerca de los beneficios del consumo de lácteos, como parte del programa Gracias a la Leche que convoca a académicos de universidades de distintas regiones del país. Uno de los reportes expuestos fue el que evidenció la relación entre el consumo de queso y el menor riesgo de obesidad y desarrollar enfermedades cardiovasculares en la población local.
La Declaración de París
La firma de la Declaración de París supuso el corolario de la Cumbre Mundial de la Leche 2024. El acuerdo ratifica el compromiso de la industria con el suministro de alimentos nutritivos a miles de millones de consumidores y el sustento de alrededor de mil millones de personas, entre ellos agricultores, procesadores, proveedores de servicios, mayoristas, minoristas y otros.
Los firmantes reconocen “el papel del sector lácteo en la sostenibilidad ambiental y la necesidad de desacelerar el cambio climático”, y representa un paso adelante de la Declaración de Rotterdam a través de la cual la IDF y la FAO se comprometieron con el desarrollo sostenible del sector lácteo. Además, constatan que el progreso actual está lejos de lo que se requiere para cumplir los objetivos de la Agenda 2030.
De hecho, el mundo está experimentando un retroceso es uno de los principales ODS: la erradicación del hambre. Un informe de la FAO y otras cuatro agencias de Naciones Unidas calculó que este flagelo afecta al nueve por ciento de la población global, es decir, 733 millones de personas. En América Latina, de acuerdo al reporte, 41 millones de individuos pasaron hambre en 2023. Si bien la situación había tendido a empeorar desde 2016, la crisis derivada de la covid-19 agudizó el problema.
“Así como en su momento la ONU decidió hacer una COP en Chile, la razón por la que IDF opta por nuestra país para la Cumbre Mundial de la Leche es porque como sector hemos dado signos de compromiso y alineamiento con los temas que se están trabajando en el ámbito internacional, dentro de ellos la sustentabilidad. Organismos como la FAO consideran a la leche como un pilar de la seguridad alimentaria en el mundo,”, señaló Octavio Oltra, gerente del Consorcio Lechero.
El ejecutivo –quien fue uno de los conferencistas de la delegación chilena, junto a otras dos ejecutivas que abordaron aspectos como, avances en sustentabilidad y bienestar animal– puntualizó que la Cumbre advirtió acerca de los problemas relacionados con el incremento de la inseguridad alimentaria global, lo que exigirá de enormes esfuerzos a nivel de los sistemas productivos, entre los cuales la industria de la leche tiene un rol prioritario según la FAO.
“Para este organismo, los lácteos son alimentos de una alta densidad nutricional, es decir, que consumiéndolos se pueden cubrir muchos requerimientos nutricionales al mismo tiempo. Entonces, especialmente para países que producto de la pandemia o conflictos, están viendo amenazada su disponibilidad a alimentos, será una herramienta muy importante. Y en eso como sociedad tenemos una tremenda experiencia con la política de la entrega de leche Purita que fue fundamental para erradicar la desnutrición infantil”, acotó Oltra.
La Declaración de París acordó comunicar los compromisos cuantificados y metas asumidas por el sector lácteo, incluidas las empresas y asociaciones, en pos de la sostenibilidad; documentar y compartir prácticas lácteas sostenibles alineadas con los ODS para una adopción más amplia por parte de las partes interesadas; fomentar y apoyar la consulta abierta entre el sector lácteo y los tomadores de decisiones para hacer de la industria un actor proactivo en el cambio transformador hacia sistemas alimentarios sostenibles.
Del mismo modo, el acuerdo hace un llamado a grupos de interés en todo el mundo a reconocer el papel fundamental de la industria láctea en la aceleración de una transformación sostenible de los sistemas alimentarios, desde una perspectiva socioeconómica, ambiental y de salud pública. Y además, aspira a mejorar el diálogo y la colaboración público-privada para la creación de un entorno propicio para adoptar prácticas sostenibles que reflejen las necesidades y realidades locales, entre otros aspectos.
Colaboraciones público-privadas
La obtención de la sede de la Cumbre Mundial por primera vez para un país latinoamericano es resultado, entre otros atributos, por los hitos que la industria local ha registrado en la última década en múltiples áreas, entre ellas la de producción limpia. Este año, las principales empresas del sector (que procesan el 82 por ciento de la leche del mercado local) firmaron un segundo acuerdo en esta materia y que fue apoyado por los ministerios de Economía, Agricultura y Relaciones Internacionales, la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa) y la Agencia de Sustentabilidad Energética.
Oltra destacó que el país está bien posicionado en el ecosistema IDF porque los avances de su sector productivo están siendo apoyados por instituciones públicas y agencias gubernamentales, y de hecho Chile fue uno de los países que contó con representación de autoridades en la Cumbre, tal como Estados Unidos, China o India. “Creemos que tenemos una relación público-privada muy positiva, por ejemplo, con el Ministerio de Agricultura y el programa Chile Origen Consciente; y el Ministerio de Economía a través de la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático, entre otras colaboraciones”.
En 2023, Chile procesó un total de 2.338 millones de litros de leche, producidas por un total de 1966 planteles y 73 comunas entre las regiones de Coquimbo y Los Lagos. A nivel de exportaciones, el sector lácteo contribuye con el uno por ciento de los envíos de alimentos y bebidas y un 0,2% del total nacional. El 2023, productos lácteos nacionales llegaron a 39 países del mundo (Por: Luis Francisco Sandoval. Agencia
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