Según el edicto judicial publicado el 20 de febrero, los quesos se encuentran en los depósitos de SanCor ubicados en La Carlota (Córdoba) y Gálvez (Santa Fe) y están respaldados por los warrants N° 7281, 7282 y 7352 de la serie “U”, emitidos por Control Union Argentina S.A. en favor de SanCor, pero negociados a IIG Structured Trade Finance Fund Ltd. en calidad de acreedor.
Esta situación no es nueva para la cooperativa. En julio del año pasado, logró frenar un remate de casi 700.000 kilos de quesos valuados en aproximadamente u$s5 millones, tras alcanzar un acuerdo con el mismo fondo acreedor. Este antecedente es clave, pero con una diferencia sustancial, ahora la empresa está en concurso de acreedores, lo que complicaría llegar a un acuerdo para evitar la subasta.
Por otra parte, según fuentes del sector, de acuerdo con el artículo 24 de la Ley de Concursos y Quiebras, una vez declarado el concurso preventivo, los acreedores deben presentar sus créditos para ser verificados por el síndico designado. En este contexto, cualquier ejecución o subasta de bienes de la empresa concursada podría ser suspendida si se determina que afecta el proceso de reorganización patrimonial de SanCor. Este marco legal podría influir en la subasta programada, abriendo la posibilidad de que la cooperativa solicite medidas para proteger sus activos y garantizar la continuidad de sus operaciones.