Un informe revela una tendencia positiva en la producción mundial, aunque con importantes diferencias regionales que modelan el panorama.
El sector lácteo global navega en aguas de crecimiento, aunque de manera heterogénea y moderada. Según un informe de CLAL.it sobre el primer semestre de 2025, la producción de leche mundial mostró una tendencia positiva en general, con un aumento del volumen recogido en la mayoría de las principales cuencas lecheras. Este crecimiento, si bien no es explosivo, aporta estabilidad y optimismo a la industria en un contexto de mercados desafiantes.
En el hemisferio norte, los datos revelan una situación de crecimiento lento pero firme. La Unión Europea registró una leve mejora en la recolección de leche cruda, impulsada por un buen desempeño en países como Polonia e Irlanda, aunque con la excepción de una caída en la producción alemana. Por su parte, Estados Unidos mantuvo su volumen de producción gracias a una mayor productividad lechera por animal, que logró compensar una disminución en el número total de vacas.
La recuperación en Oceanía es otro factor clave en la ecuación global. Después de períodos difíciles, Nueva Zelanda y Australia han mostrado signos de resurgimiento en su producción lechera. Este repunte es crucial, ya que ambos países son actores fundamentales en el mercado lácteo internacional, y su capacidad para aumentar la oferta influye directamente en los precios y la disponibilidad de productos en el mercado de exportación.
En América del Sur, el panorama es particularmente alentador. Argentina se destaca con un sólido y significativo crecimiento en la producción de leche, consolidando su posición como un proveedor clave. Brasil también exhibe una tendencia positiva en su sector lácteo, lo que contribuye de forma importante al volumen total de la región. Estos resultados demuestran la vitalidad de la industria en el Cono Sur y su creciente relevancia a nivel global.
En síntesis, el mercado lácteo mundial se encuentra en un punto de equilibrio. El crecimiento moderado pero generalizado de la oferta evita un exceso de producto que presione los precios a la baja, mientras que la recuperación en zonas clave y el buen desempeño de otras sostienen el volumen global. Para los analistas del sector, este panorama de estabilidad ofrece un respiro y sugiere que, a pesar de los desafíos, el futuro de la industria es prometedor.
Fuente: Diario Lechero