El consejo rector de Alba Ganaderos, la segunda cooperativa láctea más grande de Andalucía con una producción de 130 millones de litros de leche anual, ha prescindido de vender su producto a Lactalis-Puleva por “imponer” una bajada de precios y comienza un nuevo camino con la firma Covap.

Los socios de la cooperativa reunidos en asamblea han decidido no firmar el contrato “impuesto” por Lactalis, que suponía una bajada de 9 céntimos en el precio pagado por el litro de leche y la obligación de entregar el 100 % de su producción, y han abandonado las negociaciones después de días de protestas en el sector.

En un comunicado, han anunciado que la cooperativa pasa a formar parte de Covap como suministradores para gestionar así la leche que hasta ahora se vendía a Puleva y, en una segunda fase, la totalidad de los litros de los clientes de Alba.

La cooperativa Alba Ganaderos SCA está conformada por 80 socios activos repartidos en cuatro comunidades autónomas -Andalucía, Extremadura, Murcia y Comunidad Valenciana-, es la segunda más grande de Andalucía y su volumen de producción de leche de vaca supera los 130 millones de litros anuales.

Sus socios representan, entre otros, el 100 % de la leche de vaca producida en Málaga y Granada, provincia en la que se ubica la fábrica la empresa Lactalis-Puleva.

Hasta la ruptura de las negociaciones por parte de la central lechera, la cooperativa de Alba ganaderos SCA, era la responsable de abastecer a esta fábrica con más del 60 % de la leche andaluza transformada allí.

Alba Ganaderos ha lamentado que Puleva haya optado “por no llegar a un acuerdo con sus ganaderos” y ha interpretado que termina así con una producción sostenible y con leche de proximidad, dejando de lado la importancia de la producción “kilómetro 0”.

Ha pedido además a las administraciones valentía para hacer cumplir las normas, especialmente la Ley de la Cadena y a los ganaderos que han llegado a acuerdos con Puleva que “el individualismo egoísta y la falta de compromiso y unión” genera vulnerabilidad al sector.

“El coste de esta lucha ha sido alto y al decidir Puleva no negociar, nuestros ganaderos se han visto forzados a buscar otra salida para no morir en el intento, otros destinos para su leche, otras empresas con quien negociar y otras alternativas para subsistir”, ha apuntado la cooperativa.

En ese nuevo camino han llegado a un acuerdo con Lácteos Covap, cooperativa también andaluza, para avanzar en una producción responsable y sostenible.