La empresa ligada a la familia Larraín detalló que el incremento se produce en los dos segmentos de negocio que compite: alimentos -que explica casi 90% de las ventas- creció en 7,4%, mientras que el vitivinícola aumentó en 3,9%.
En alimentos y abarrotes subió 4,6%; en refrigerados 9,6%, y en congelados 13,2%. Esto está relacionado con el aumento de la demanda asociado al Covid-19 que se vio en productos como aceites, conservas, leche en polvo y hortalizas congeladas.
La utilidad llegó a $ 24.494 millones, cifra un 48,4% superior a la del ejercicio 2019, detalló.