“No cabe duda que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, no ha sido bien informado sobre el tema de la producción de leche en La Laguna, o ignora demasiado sobre el tema”, declaró el productor Mario Valdez Berlanga.
Lo anterior lo justificó con varios puntos: en primera instancia porque la mayoría de los insumos que consumen las 450 mil vacas de ordeña proviene de otros estados del país y del extranjero, segundo la producción de leche en el sur no es óptima por sus condiciones climáticas, ni la producción de carne es rentable, tercero porque ya fracasó en una ocasión en Hidalgo en los tiempos de Luis Echeverría al no contar con la infraestructura millonaria que se requiere y cuarto porque pensar en cerrar la cuenca lechera más importante en el país representaría dejar sin empleo a cuando menos 95 mil personas, lo cual sería un serio problema.
“Es una mentira que las zonas desérticas no son aptas para producir leche, si no vean los casos de Israel, Arizona, California, Nuevo México y Texas, por citar unos ejemplos”, agregó.
Lo anterior se da a conocer a unas horas de que el Presidente de México en Tabasco, en su discurso, mencionara la necesidad de cambiar la cuenca lechera de La Laguna hacia el sur del país, dada la problemática del agua que ya contenía altos índices de arsénico ante la sobreexplotación del acuífero.
“Lo que tal vez nunca le informaron al presidente López Obrador que la producción de leche en el sur del país no es para nada rentable, pues mientras aquí una vaca te da 35 a 40 litros diarios de leche, allá no llegaría ni a los cinco litros por las condiciones climatológicas, lo cual quedó demostrado en las épocas del presidente Luis Echeverría cuando intentó hacer lo mismo, pero en el estado de Hidalgo”, enfatizó Valdez Berlanga.
“Tampoco le han enseñado los números de que somos un país deficitario en producción de leche y por ello la necesidad de exportar millones y millones de toneladas de leche en polvo, aún y cuando ésta no registra los certificados de calidad y pureza que reclama la Cofepris y la propia Secretaría de Economía”, reiteró.
En agosto de 2018, la entonces Sagarpa reconoció que en el primer semestre del año nuestro país importó 180 mil 619 toneladas de leche en polvo para satisfacer el abasto nacional, que no se cubrió con los cinco mil 768 millones de litros del lácteo que se obtuvieron entre enero y junio pasado, sobre todo en diez estados de la República, incluida la cuenca lechera de La Laguna.
“Tampoco le han informado al presidente de México que la cuenca lechera de La Laguna es la más importante del país con una producción diaria de 9 millones de litros, que se generan gracias a la mano de obra de 45 mil trabajadores que operan la ordeña de las 450 mil cabezas de ganado y otros miles más en sus procesos de industrialización, distribución y venta. O sea, unos 95 mil empleos se generan en la cuenca lechera”, agregó.
“Otra imprecisión fuerte es el decir que una zona desértica, como la nuestra, no es apta para la producción de leche, lo que muestra una vez más su desconocimiento del tema de la leche, pues entonces como le han hecho a lo largo de los años Israel, Nuevo México, Arizona, California y Texas, tan solo por citar algunos ejemplos”.
“Otro dato que hay que informarle al señor presidente es que los insumos o el alimento para las vacas no se siembra en La Laguna, sino en otros estados de la república y del extranjero, lo cual seguramente también desconocía. El maíz grano, que es uno de los principales insumos lo traemos de Chihuahua o de la Unión Americana”.
“No estamos peleando que se produzca leche en Tabasco, pero la pregunta obligada es porque no en Chiapas”, recalcó Valdez Berlanga.
“Si el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quiere llevarles a sus paisanos una cuenca lechera o se las quiere construir, adelante, pero no a costa de perjudicar a miles y miles de familias en La Laguna”, recalcó el productor lechero.
