La provincia incentiva la certificación sanitaria de pequeños tambos queserías, desde el Instituto de Alimentación y Bromatología (ICAB) y la Coordinación de Lechería de la Provincia trabajan en un plan de asistencia para tambos queserías.
Al respecto al Coordinador de Lechería de la provincia, Horacio Jaureguiberry explicó que desde el año pasado vienen trabajando con Agricultura Familiar y también el área correspondiente del SENASA en el marco de una Resolución del Ministerio de la Producción del 2021. El objetivo es que cada productor tambero que fabrique queso pueda acceder a una pre habilitación por parte del Instituto de Bromatología mediante la cual los productores (queseros) se les permite la venta en los negocios de cercanía. Si bien es otra área comentó que esto se hace extensivo también para los fabricantes de chacinados, productores de huevo o explotaciones familiares.
Desde Lechería se dictan cursos de capacitación, asistencia técnica y financiación que actualmente se obtienen desde la Nación y la provincia. En este último caso los créditos llegan al valor de 30 mil litros de leche (55,50 pesos actuales) a un máximo de 1,65 millón de pesos, con un año de gracia y tres de plazo, siempre se devuelve a valor producto.
Inscripciones
Los interesados se pueden comunicar con el área Lechería, el Instituto de Alimentación y Tecnología, o las áreas de agricultura familiar o SENASA, explicó que están trabajando en el marco de una mesa técnica. Después de receptar el pedido toman contacto con el interesado para comenzar a trabajar en distintos aspectos para encuadrar la actividad y las exigencias del producto terminado.
Actualmente están realizando estas tareas con 4 tambos de Crucecita 3°(Nogoya) se inicia con todo lo relacionado a sanidad, a través de SENASA se realizan los análisis de brucelosis y tuberculosis, Agricultura Familiar se encarga del Registro Nacional de Agricultura Familiar (RENAF) y desde le Coordinación los inscriben dentro de los tambos registrados en el marco de las normativas provinciales. Con posterioridad a esto se comienza con las capacitaciones y tareas previas para acceder a las certificaciones. Agregó que estas son pre habilitaciones que se otorgan por 3 años la próxima etapa es la inscripción en Bromatología cumpliendo con todas las exigencias del Código Alimentario Argentino.
El producto tiene que llevar todo lo que exige la Ley de Etiquetado relacionado a los datos del responsable de la fabricación, número de inscripción y características del producto (queso duro, semiduro o cremoso entre otros).
Evaluación
En declaraciones a Paralelo 32, Jaureguiberry explicó que pasada la pandemia durante la cual ajustaron los aspectos organizativos, comenzaron con las inscripciones, actualmente tienen 14 tambos, entre otros en nuestra zona, en Aranguren, Crucecita 3°. Agregó que tienen compromisos con solicitudes de otros departamentos, el objetivo es que sean los productores los protagonistas del proyecto y que no sea un tema que manejan profesionales o el Estado. “Los tamberos deben promover y desarrollar la actividad” remarcó.
En general los productores que han ingresado al programa se han mostrado conformes, aseguró el funcionario, además realizan capacitaciones para que puedan acceder a los créditos.
Finalmente comentó que, si bien llevó su tiempo, han conformado un equipo de trabajo integrado por las distintas áreas, con representantes de la Dirección de Fiscalización Alimentaria, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria, el Instituto Nacional de Tecnología Industrial, Agricultura Familiar, municipios y la Dirección de Defensa del Consumidor.
Bromatología
El titular del Instituto de Alimentación y Bromatología, Pablo Basso precisó que “de ese espacio surgió una propuesta que terminó cambiando una ley nacional: el Código Alimentario Argentino, porque consideró a la agricultura familiar como un sector productivo en el rubro especifico de tambo quesería. Inclusive luego se amplió hacia otros rubros”.
Expresó también que, a partir de estos cambios, se empezaron a permitir habilitaciones de salas de elaboración más chicas sin los requisitos originales que tenían los tambos quesería o las fábricas de quesos a nivel industrial, contemplando de igual manera las normas propias en cuanto a seguridad alimentaria y en materia fiscal. “Hoy estamos viendo que muchos pequeños productores de quesos, vendedores que habitualmente se encuentran en ferias o almacenes de barrio colocando sus productos, pueden comercializarlos con la correspondiente habilitación, con su propia marca, registro y trazabilidad; y controlados de manera correcta con los correspondientes análisis. Esto también es un agregado de valor sanitario”, sostuvo el funcionario
En Victoria
El Coordinador Jaureguiberry comentó que no hay tambos quesería del departamento Victoria que se hayan interesado por el programa. Ante este panorama, Paralelo 32 consultó a Luciana Silva, Directora de Producción y Ambiente de la municipalidad y tampoco tenía conocimiento al respecto. Son muchos los pequeños productores de queso que tenemos en nuestra zona, que además fabrican productos de muy buena calidad, esta alternativa de registrar el producto para que lo pueda expender en cada ciudad o región, es una alternativa interesante. Actualmente este tipo de productos solamente se encuentra en despensas o almacenes de barrio.