Se llevó a cabo anoche en la sede gremial de ATILRA de nuestra ciudad, la última asamblea de 2019. Tal como se venía manejando y anunciando, el sector aceptó de manera definitiva y unánime la negociación que se cerró hace algo más de una semana, donde se desactivó una huelga programada de 4 días. Recordemos que el Centro de la Industria Lechera había acercado al gremio de la actividad un nuevo último ofrecimiento de recomposición de las remuneraciones y logró distender la situación. Las empresas propusieron acercarse a la inflación anual con un aumento del 32,5% que se cobrará en dos tramos entre diciembre y enero. Eso sumado al 23% que ya habían abrochado a lo largo del año los deja en el orden del 55,5% anual.
Además, también propusieron compensar el desfasaje de estos meses que impactó en el poder adquisitivo del salario con un bono de 36 mil pesos que tendrá el carácter de no remunerativo y se distribuirá en pagos hasta abril de 2020. Los lecheros cobrarán 18.000 pesos en diciembre, 5.000 pesos en enero y febrero y 4.000 pesos en marzo y abril.