Reconoció de momentos complicados en el año por temporada de estiaje, lo que elevó los costos de producción de los ganaderos a quienes les resultaba incosteable.
“La verdad es que si estaban en una situación complicada en donde se les pagaba el producto hasta en 6 o 7 pesos, entonces que haya subido hasta en dos o tres pesos en cuatro o cinco meses si fue importante”, expuso.
Así mismo explicó que se trata de un fenómeno de oferta demanda en donde en temporada de lluvias cuando el animal se hecha produce menos leche y su costo se eleva.
“Tenemos que si la vaca llega a producir 35 litros, pues en temporada de lluvias producen 28 litros porque se echan, entonces hay menos leche en el mercado y su precio se eleva”, explicó.
Para concluir el encargado de la política del campo aceptó que aún se sigue pagando el producto a bajo costo, estimándose que el precio final al consumidor en tiendas supera hasta los 23 pesos, haciendo votos porque haya conciencia y se pague lo justo.