Australia sigue siendo uno de los productores de leche más competitivos en costos entre las principales regiones exportadoras de productos lácteos, a pesar del aumento de los costos de producción mundial de leche en los últimos cinco años, según un informe de Rabobank.
El informe, ‘ El costo de la leche: análisis de los costos de producción de leche’ , destaca un aumento del 14% en los costos totales promedio de producción de leche en ocho regiones exportadoras clave (Argentina, Australia, China, Irlanda, Nueva Zelanda, Países Bajos, California y el Alto Medio Oeste de los EE. UU.), lo que equivale a US$0,06 adicionales por litro entre 2019 y 2024. Más del 70% de este aumento se ha producido desde 2021.
Australia se mantiene entre los productores con los costos más bajos, solo superada por Nueva Zelanda, a pesar de los significativos aumentos en los costos laborales. Además, ha logrado consistentemente sólidos márgenes brutos de precio de la leche desde 2019, junto con Nueva Zelanda y los Países Bajos.
Emma Higgins, analista agrícola sénior de Rabobank, señala que el aumento de los costos de producción lechera ha sido generalizado. «La mayor parte de la presión sobre los costos proviene de los gastos de explotación en las explotaciones, más que de costos adicionales como el servicio de la deuda, los impuestos y la depreciación».
Higgins explica que el último aumento de costos, que comenzó en 2021, se debió a una combinación única de factores, como las interrupciones en la cadena de suministro, el aumento de los costos de envío, las condiciones climáticas extremas, la guerra de Ucrania, el aumento de los precios de la energía y el incremento de los costos de los piensos y fertilizantes. Los cambios en la política monetaria en respuesta a la inflación inducida por la COVID-19 agravaron aún más estos desafíos.
China, el productor de leche con el mayor costo
Para 2024, los costos comenzaron a disminuir en las ocho regiones, lo que permitió que los gastos de producción volvieran a los niveles de 2019. «Los gastos de alimentación han sido el principal impulsor del aumento de los costos, con un aumento promedio del 19 % en las facturas de alimentación en las ocho regiones desde 2019», afirma Higgins.
Sin embargo, la mejora de los rendimientos y las condiciones climáticas favorables en 2024 han propiciado una disminución en el gasto en piensos, mientras que los costes de los fertilizantes también se han reducido gracias a la estabilidad del suministro. La bajada de los tipos de interés en muchas regiones está reduciendo aún más las presiones financieras.
Higgins señala que las estructuras de costos varían según la región. Los sistemas basados en pasturas en Australia, Nueva Zelanda, Países Bajos e Irlanda suelen tener costos de alimentación más bajos como porcentaje de los gastos totales. En cambio, los sistemas intensivos, como los de China y Estados Unidos, dependen más de alimentos importados, lo que hace que los costos de alimentación representen una mayor proporción de los gastos generales.
Los costos laborales se han disparado en Australia, con un incremento de más del 50 % en moneda local desde 2021, el mayor incremento entre las ocho regiones evaluadas. Mientras tanto, Nueva Zelanda, Australia y Argentina han enfrentado la mayor presión por las altas tasas de interés.
Si bien China sigue siendo el productor de leche con mayores costos, el país ha mejorado su competitividad en los últimos años. «Los costos de alimentación representan más del 60 % de los gastos totales de producción lechera de China debido a la gran dependencia de alimentos importados. Sin embargo, la caída de los precios de los alimentos en 2023 y 2024, impulsada por caídas de dos dígitos en los precios del maíz y la soja, ha contribuido a reducir los costos de producción», afirma Higgins.
Fuente: https://www.dairyglobal.net/
