La demanda de lácteos en el mercado brasileño, uno de los principales destinos para los productos de la lechería uruguaya, está más retraída a principios de febrero, tras la suba de precios del mes anterior. Así lo destacó el Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (Ocloa, en el marco de su actualización quincenal del mercado.
Lo más importante es que las importaciones aún se mantienen estables y en niveles altos, mientras que la producción brasileña de leche comienza con una tendencia a la baja y esa tendencia debería mantenerse para los próximos meses, según analizó la fuente.
Por otro lado, la disponibilidad -producción interna más importaciones, menos exportaciones- comienza mostrar signos de caída.
En el caso de la leche en polvo entera, el producto también enfrentó un mercado menos comprador y los valores para los productos de la categoría también tuvieron un ligero retroceso. La leche en polvo entera industrial cerró en R$ 27,10 /kg. (US$ 5,18/kg.), mientras que la leche en polvo fraccionada cerró en R$ 29,10 (US$ 5,56/kg.), destacó Ocloa.
Desde la segunda mitad del año pasado, a partir del aumento de los precios internos brasileños, el volumen de leche importada creció. A principios de 2023, el volumen de leche extranjera que ingresa al país sigue siendo significativa, especialmente si se compara con el mismo período de 2022. Los principales socios de Brasil están en el Mercosur y Argentina, por ejemplo, tiene desafíos climáticos por resolver.