El Banco República (BROU) definió las características del crédito voluntario de apoyo al sector lechero para paliar su crisis financiera, acelerando en cierta medida la disponibilidad de esta herramienta.
El préstamo se pagará con el aumento del precio de la leche tarifada que está vigente y la garantía sería el dinero sobrante del Fondo de Garantía para la Lechería (Fogale). Ese sobrante son alrededor de US$ 16 millones —US$ 3 millones del Fondo Anticíclico y US$ 13 millones del fideicomiso no utilizados— y la forma de capitalización que ofrecía el Ministerio de Economía y Finanzas, consistía en hacer un préstamo vía BROU.
El préstamo voluntario abarcará a productores que hayan remitido menos de 480.000 litros de leche al año a las industrias que comercializan leche cruda en el mercado. Son productores que remiten alrededor de 1.300 litros diarios. Falta que el Poder Ejecutivo reglamente el funcionamiento del Fogale para los productores medianos y grandes, para que luego el BROU emita los detalles de la operativa para esos casos.
“Lo importante es que este crédito está disponible para todos los tamberos, independientemente de su categoría ante el banco, pero aquellos que estén mejor categorizados, tendrán bonificaciones”, destacó el directivo de la Agremiación Tamberos de Canelones, Justino Zavala. El BROU estableció que la tasa de interés será fija y con una importante bonificación que variará según la calificación del cliente. Los que tienen calificación de 1 a 3 tendrán mayor bonificación que los calificados 4 y 5 (deudores con serios problemas de pago).
El financiamiento se considera en unidades indexadas y por un monto hasta el equivalente a US$ 10.000. El tope dependerá del volumen de leche remitido. El plazo de los créditos será de hasta cinco años y los pagos se realizarán trimestralmente.
Para acceder al crédito, los clientes deberán estar al día con el BROU o tener un convenio de pago vigente. La institución financiera aclaró que se estudiarán solicitudes de clientes con deudas actualmente gestionadas por el Área de Recuperación del BROU y de productores que no sean clientes del banco.
Zavala dijo a El País que aunque todavía no está firmado cómo se hará, a partir de este mes, “el productor que quiera tomar este instrumento financiero, va a tener en su liquidación el importe de lo que le corresponde por el aumento de leche consumo y la cuota. El que no la quiera tomar lo comenzará a cobrar”. Se estima que se cobrarán en el entorno de entre 19 y 20 centésimos por litro, según calculó Zavala.
Mientras tanto, según datos oficiales, hasta el pasado mes de junio cerraron 98 tambos debido a la crisis de precios y la falta de liquidez. Cientos de vacas lecheras son engordadas y enviadas a faena.
“Tenemos la suerte de que las vacas valen bien (la carne) y la mala suerte de tener que venderlas”, explicó el presidente de la Sociedad de Productores de Leche de Florida, Horacio Rodríguez. La leche valía US$ 2.700 toneladas (diciembre de 2018) con un dólar a $ 29.Hoy vale US$ 3.300 y el dólar en $ 36 y no cambió el precio, el litro sigue a 30 centavos de dólar.