La consejera delegada de Leche Río, Carmen Lence, ha confesado que “tanto los ganaderos como la industria” láctea “sufren” por los incrementos de los precios, en definitiva, por la alta inflación.
Lence ha precisado que “el problema es que a día de hoy hay falta de leche tanto en Europa como en Galicia”. “Al haber escasez de leche estamos teniendo la posibilidad de repercutir los precios con nuestros clientes que son la distribución”, ha subrayado.
La empresaria lucense ha destacado que “poco a poco hay que conseguir esos márgenes que ayudan a que los ganaderos tengan un margen digno, que puedan seguir con sus explotaciones y seguir creciendo”.
Recuerda que “como consecuencia del inicio de esto, en mayo o junio del año pasado, en aquel momento no se conseguían repercutir los costes y algunos ganaderos decidieron vender las vacas y ahora hay falta de cabaña”. “Esto va a llevar un tiempo para que se recupere”, ha aventurado.
La CEO de Río ha asegurado que la empresa “está muy bien” y así ha confesado que “en lo poco más de tres años” que lleva en la empresa, desde el fallecimiento de su padre y fundador, Jesús Lence, “ha sido una montaña rusa y no fue la mejor manera de empezar y daba un poco de miedo y luego el impacto de la pandemia”.
Carmen Lence se ha afanado en trasladar que en Leche Río se han recuperado “bien” y así “hemos acabado el año 2021 con cifras de negocio por encima del 2019, lo que es muy positivo”, celebra.
“La empresa está empezando a sacar productos de valor añadido, estamos trabajando mucho en innovación con toda la dificultad que esto tiene y la inversión que requiere”, ha señalado.
Finalmente ha aprovechado para resaltar que “hay un reconocimiento de la empresa tanto por los ganaderos, como por los empleados y la sociedad en general, que para mi es muy positivo”, se jactaba Carmen Lence.