La preocupación de todo el Gobierno por la falta de divisas fue el motivo por el cual el Banco Central (BCRA) días atrás decidió extender hasta fin de año el punto 7° de la comunicación A 7106, que obliga a las compañías a refinanciar el 60% de sus deudas en dólares. Según cálculos privados, durante 2021 el BCRA podría evitar así la demanda de “entre u$s 3000 millones y u$s 4000 millones” a partir de esta redefinición del cepo a deudores corporativos.
Un análisis del equipo de research de Invertir en Bolsa (IEB), en base al informe de deuda privada del Banco Central, señala que al sumar los vencimientos de bancos e instituciones financieras, exportadores y emisores de ON, la totalidad de los pasivos corporativos llegan a un total de u$s 6591 millones este año. Por tanto, suponiendo una reestructuración del 60% de los pagos, el Central se ahorraría de entregar unos u$s 3955 millones.
No obstante, Federico Broggi, analista de research de IEB, explicó a El Cronista: “La comunicación del Banco Central exceptúa de la obligación de refinanciar a aquellas empresas cuyas obligaciones son menores a los u$s 2 millones, por lo que no toda deuda en dólares deberá ser reestructurada”.
En ese sentido, Broggi estimó que con la extensión de la A 7106 el BCRA va a poder evitar desprenderse de entre u$s 3000 y u$s 4000 millones, siempre y cuando tengan éxito los canjes.
Por otro lado, Juan Ignacio Paolicchi, economista de Empiria, agregó que si se considerara la deuda intercompany que vence en los próximos nueve meses y con plazo exigible, pero sin fecha pactada de devolución, el monto de aquí a fin de año crecería bastante más. “Según el BCRA, ese tipo de deuda alcanza casi u$s 15.000 millones, por lo que reestructurando el total -algo prácticamente imposible que suceda-, se ahorrarían u$s 9000 millones”.
Respecto de este punto, Broggi indicó que en el mencionado informe de IEB no se refirieron a lo que pueda suceder con la deuda intercompany “porque el Banco Central ya avisó que no va a dar dólares” para este tipo de operaciones.
Días atrás, además de anunciar la extensión del refinanciamiento obligatorio, el BCRA informó que habrá flexibilizaciones en la norma. En ese sentido, la filial argentina de la calificadora de riesgo Moody’s emitió un comunicado en el que señaló que, “si bien se flexibilizan ciertas condiciones para el acceso al Mercado Único y Libre de Cambios (MULC) para el sector corporativo local, se expone la débil generación de dólares comerciales y la falta de acceso al mercado internacional de crédito luego de la restructuración de deuda soberana en septiembre de 2020”.
En otro párrafo, Moody’s añadió que “la extensión de las restricciones al MULC hasta diciembre de 2021 obligará a emisores privados a refinanciar deudas financieras previamente no alcanzadas por la medida por un monto levemente superior a los u$s 1000 millones.
“Las compañías impactadas con mayores vencimientos son Mastellone Hnos. (u$s 200 millones), Panamerican Energy Sucursal Argentina (u$s 166 millones), YPF EE (u$s 100 millones), Transener (u$s 99 millones) y Vista Oil & Gas (u$s 50 millones)”.
Otra fuente de ahorro de dólares para el Central, aunque mucho más moderada, es la seguidilla de reestructuraciones que vienen realizando las provincias con vencimientos de deuda. Según un cálculo de IEB, los acuerdos alcanzados con acreedores por parte de Mendoza, Neuquén, Chubut, Río Negro, Córdoba, Salta, Entre Ríos y Jujuy permiten una disminucióne en la demanda de dólares para este año que equivale a u$s226 millones.
“A algunas provincias les vino bárbaro que Guzmán pida que reestructuren, porque ninguna quería pagar, así se guardaban dinero para el año electoral. Excepto CABA”, consideró una fuente de mercado.