Con la apertura del nuevo mercado, Brasil, uno de los mayores productores y exportadores mundiales de alimentos, pretende impulsar el sector lácteo y vender al país asiático unos 4,5 millones de dólares en quesos al menos en el primer año.
La decisión china fue confirmada por la ministra brasileña de Agricultura, Tereza Cristina Correa, quien señaló que la apertura del nuevo mercado impulsará la cadena productiva y apoyará a un sector que no pasa por su mejor momento en Brasil, donde hay 1,2 millones de pequeños productores de leche.
“Creo que esta es una noticia excepcional para el sector lácteo, que está atravesando un momento muy difícil y sin esperanza. Eso trae esperanza para la industria láctea”, dijo la ministra.
Aunque la certificación estaba lista desde 2007, el país suramericano, que produce 600 toneladas de leche al año, no había podido vender sus productos lácteos a China porque no existía una planta autorizada para la exportación.
Tan solo en quesos, Brasil espera exportar a China unos 4,5 millones de dólares, según Viva Dairy, la asociación que representa a la industria láctea brasileña.
En 2018, los chinos importaron 108.000 toneladas de queso, un producto cuya demanda ha tenido una tasa promedio de crecimiento de 13 % en los últimos cinco años, según la asociación.
“Las exportaciones brasileñas de queso han crecido un 65,2 % en los últimos tres años. Antes de la apertura del mercado chino, el sector ya venía invirtiendo en la entrada de productos en China a través de la participación en ferias”, señaló el Ministerio a través de un comunicado.
Desde 2009, China es el principal socio comercial de Brasil y el volumen de negocios en la balanza comercial entre ambos países alcanzó los 98.900 millones de dólares el año pasado, según datos oficiales.