En la ganadería lechera del trópico, el mayor desafío siempre ha sido lograr altos niveles de producción en un entorno hostil, donde el calor, la humedad y la calidad del forraje suelen limitar el rendimiento del ganado. Sin embargo, Hacienda El Empedrado ubicada en el municipio de Ansermanuevo (Valle del Cauca), ha sido pionera en el manejo genético de gyr y girolando en toda Colombia.
Fernando Durán Carvajal, médico veterinario y director de la ganadería, contó que “desde 1988 en El Empedrado identificamos el potencial del gyr lechero en Brasil y decidimos incorporarlo a nuestro hato. Con el tiempo, esta empresa seleccionó solo a las mejores familias, aquellas que transmitían un biotipo funcional, una alta producción de leche y características hereditarias sobresalientes.
Hernando Barahona, médico veterinario zootecnista y director del programa Embriogán, afirmó que “lo más importante en la genética no es solo elegir las mejores vacas, sino asegurarnos de que las cualidades deseadas se transmitan consistentemente a las siguiente generaciones”.
Es por esta razón que el trabajo en la hacienda se ha centrado en consolidar líneas genéticas con altos niveles de heredabilidad en producción de leche, longevidad y resistencia a enfermedades.
Gracias a este trabajo de selección, El Empedrado ha logrado establecer un hato de 180 vacas girolandas en producción y 50 gyr lechero puras, con niveles de rendimiento que superan el promedio nacional.
Según Durán, “esta tecnología nos ha permitido garantizar que la genética de Sansao siga beneficiando a la ganadería lechera en el trópico”.
El profesional aseguró que sus clones han producido más de 10.000 dosis de semen, de los cuales 8.000 ya han sido comercializados a precios accesibles para los ganaderos del país.
La clonación no solo ha permitido preservar el legado genético de este semental, sino que también ha facilitado el acceso a genética de alto valor para pequeños y medianos productores. Mientras que una pajilla de semen del toro original tenía un costo prohibitivo de hasta 500.000 pesos, las pajillas de los clones se comercializan a 40.000 pesos, lo que ha democratizado la mejora genética en Colombia.
Los resultados son hijas de los clones de Sansao que han alcanzado producciones de 18 y 20 litros de leche en su primer parto, una cifra muy por encima del promedio nacional y que representa un avance para la ganadería tropical.
Genética de precisión
Más allá de la clonación, El Empedrado también ha incorporado herramientas de inteligencia artificial y algoritmos de selección genética para mejorar la eficiencia de su hato. Barahona aseguró que estos sistemas permiten tomar decisiones más precisas en la elección de toros y vacas reproductoras.
“Hoy en día, la genética no se basa en la intuición o en la observación empírica. Existen programas que analizan los datos de cada vaca y nos recomiendan los toros más adecuados para corregir sus debilidades y potenciar sus fortalezas. Esto nos permite mejorar el hato de manera más rápida y efectiva”, sostuvo Barahona.
Estos avances están transformando la manera en que se planifican los programas de reproducción en la hacienda, asegurando que cada generación de animales sea genéticamente superior a la anterior.
Un patrón genético y sostenible
El modelo de la Hacienda El Empedrado es una prueba de que la ganadería del futuro no dependerá exclusivamente de la alimentación o del manejo, sino de una genética mejorada que permita obtener más producción con menos insumos.
La apuesta por la clonación, la selección rigurosa y la inteligencia artificial ha permitido a esta empresa crear un hato eficiente, rentable y sostenible, adaptado a las condiciones del trópico.
“Los sellos ambientales permiten dar un valor agregado. Ese es el camino para nosotros los que producimos leche en el trópico. Sabemos que la biodiversidad es la clave”, concluyó Durán Carvajal.