Aun ese contexto, el gerente de la cooperativa, Sergio González Villa, resaltó los resultados financieros de la entidad que cuenta con 10.124 asociados. Los ingresos sumaron 2,31 billones de pesos, subieron 3,06 % frente a los 2,24 billones de 2018. Los excedentes cooperativos totalizaron 9.683 millones de pesos; se incrementaron un 54,24 % con respecto a los 6.278 millones de la vigencia anterior.
La asamblea para presentar estos y otros logros, que debió realizarse ayer, fue aplazada indefinidamente por la coyuntura desatada por la expansión del coronavirus.
Transformando el campo
González enfatizó en que Colanta ha protagonizado hitos que han revolucionado la producción pecuaria y ha logrado cambios de hábitos en el consumo de lácteos en el país, obteniendo resultados positivos.
Es así como el consumo per cápita es de 140 litros de leche por habitante al año, el cual está distante de lo establecido por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) que es de 170 litros.
“Durante más de medio siglo Colanta ha transformado su misión para impactar positivamente la calidad de vida de todos los actores, principalmente la de los asociados, a quienes se les garantiza la compra de la totalidad de su leche a precio competitivo, lo que representa una compra en el mercado nacional para todo 2019 de 833,6 millones de litros, lo que representa captaciones diarias de 2,28 millones de litros”, comentó.
Parte de la transformación e innovación introducidas el año anterior tienen que ver con la incursión en el negocio de helados, con la apertura de tres puntos de venta. “Este año esperamos consolidar la categoría con el lanzamiento del helado duro del cual ya tenemos algunas unidades en el mercado”, manifestó el gerente de Colanta.
Cuidando el ambiente
La protección del campo y de los hatos es uno de los focos de la cooperativa lechera, por lo que desarrolla programas que apuestan por el equilibrio entre las actividades productivas y el cuidado del entorno.
Parte de las estrategias están asociadas a la reducción del consumo de agua que bajó 1,29 % de 3.626 metros cúbicos por día en 2018 a 3.579 metros cúbicos el año anterior. “Superamos la meta de menor consumo de agua con respecto a toneladas producidas, al pasar de 1,95 metros cúbicos por tonelada el año antepasado a 1,90 metros cúbicos”, dice el informe de gestión de Colanta.
Otros avances tuvieron que ver con la reducción en el consumo de energía eléctrica, la menor emisión de dióxido de carbono (CO2) y de residuos sólidos.
Luis Fernando Gómez, director en Antioquia de la Confederación de Cooperativas de Colombia (Confecoop), resaltó que las apuestas de Colanta en sostenibilidad ambiental están alineadas con la Cooperación Verde, una iniciativa del sector solidario que busca trabajar por la recuperación ambiental (ver Paréntesis).
“Lo que pretendemos es trabajar por la sostenibilidad ambiental sembrando árboles, recuperando hectáreas de bosques y produciendo toneladas de oxígeno a partir de estas plantaciones que están en los Llanos”, declaró el dirigente.
Aunque el sector cooperativo no tiene un estimado de cuánto invierten estas entidades en programas sociales o de sostenibilidad ambiental, la Superintendencia de la Economía Solidaria (Supersolidaria) expidió una circular que las obliga a consolidar esas cifras a partir de 2021.
A su turno, desde las cooperativas de caficultores, Javier Sanín, resaltó como buena parte de los excedentes de estas entidades debe destinarse a inversión social de sus afiliados en los municipios productores del grano.