Después de 90 días sin casos positivos, San Luis volvió a registrar un contagio de coronavirus. La noticia tuvo un fuerte impacto ya que vino acompañada por la decisión de las autoridades de volver a la fase 1 de la cuarentena, la más estricta, cuando los puntanos ya disfrutaban de la “nueva normalidad” en fase 5.
La medida se tomó porque el paciente -un tambero de 35 años- había circulado por distintos puntos de la provincia en los días previos a que se confirmara el diagnóstico de Covid-19. Incluso, habría cruzado en forma ilegal a Córdoba y a San Juan.
Habitualmente no se dan a conocer los datos de las personas infectadas. Sin embargo, esta vez la jueza Penal de Concarán, Patricia Besso, autorizó a difundir la identidad y la foto del paciente ante su falta de colaboración para determinar la trazabilidad y fuente de contagio. Es decir, cómo contrajo coronavirus y a quiénes puede habérselo transmitido.
El hombre fue identificado como Gilberto Bongiovanni. Tiene 35 años, vive en la localidad de Tilisarao y es propietario con su familia de un tambo. Se dedica a la producción de queso, y en las últimas semanas circuló por gran parte de la provincia comercializando sus productos.
Está internado en el Hospital Madre Catalina de la localidad de Merlo, a 200 kilómetros de la ciudad de San Luis. Se encuentra demorado por la Justicia, ya que podría ser investigado por violación del protocolo de egreso e ingresó de la provincia en la cuarentena.
Según informó el gobernador Alberto Rodríguez Saá, el hombre habría salido de la provincia de manera irregular a una zona de foco de contagio como Traslasierra, en Córdoba, y regresó a la provincia sin realizar la cuarentena que en este distrito es obligatoria. También se consignó que habría pasado a la provincia de San Juan y permanecido 4 horas.
El hombre circuló luego por las principales ciudades de la provincia de San Luis comercializando el producto hasta que por su cuenta asistió a un laboratorio a realizarse un análisis de coronavirus que resultó positivo. El laboratorio avisó a las autoridades.
A partir de la comunicación oficial realizada el sábado a la noche por el gobernador y el Comité de Crisis, el pueblo de Tilisarao -a 60 kilómetros de Merlo- quedó aislado y la Policía montó un operativo de cierre de comercios.
Tilisarao es una pujante localidad ubicada a la vera de la ex Ruta Nacional 148 que une Villa Dolores (Córdoba) y Victorica (La Pampa) y que es autopista dentro de San Luis. Es el centro del Valle del Conlara donde la producción ganadera y de granos es la principal actividad. Además cuenta con un parque industrial propio con mucha actividad logística. La entrada y salida de camiones coloca a la localidad en un foco peligroso de contagios.
La familia del paciente tiene una larga tradición en Tilisarao (ver abajo). Según informó el Gobierno, cuentan con un campo muy cercano al límite con la provincia de Córdoba y allí está focalizada la investigación para determinar si existe un paso fronterizo no registrado por las autoridades por donde se habría infiltrado personas que concurren a las actividades rurales contagiados.
Ese otro campo es una propiedad cercana a la zona de producción papera donde todos los años en esta época muchas trabajadores rurales de la zona se mueven permanentemente para la cosecha. Recientemente el gobierno de San Luis puso el foco en el norte provincial tras la aparición de los casos en Traslasierra. En la sucursal del banco Nación de la localidad de Villa Dolores tres operarios que habían viajado desde la Ciudad de Buenos Aires dieron positivo y contagiaron a parte de la población de las localidades vecinas que nunca habían consignado casos positivos durante la pandemia.
San Luis cerró sus fronteras ante esos casos y empezó a controlar estrictamente la zona limítrofe con Córdoba. Se sospecha que Gilberto Bongiovanni habría transitado por caminos alternativos en el interior de esos campos o que haya tenido contacto con trabajadores rurales contagiados de la zona y de esa manera ingresó nuevamente el virus a la provincia. También Bongiovanni circuló por la provincia de San Juan en un paraje limítrofe con la provincia de San Luis.
Allí, consignó un medio digital sanjuanino, el hombre ingresó el día 26 de junio por el corredor seguro de El Encón donde le hicieron el test rápido y le dio negativo. Llevó mercadería, pero no descargó nada: de la descarga se encargaron los empleados del lugar al que la llevó y lo hicieron cumpliendo con los protocolos sanitarios establecidos, según se informó.
En la ciudad de San Luis -donde estuvo circulando con sus quesos en los últimos días- fue a almorzar a la Parrilla El Cruce. Los propietarios del local lo registraron el 30 de junio con dos personas. El comercio deberá cerrar por 15 días. Y se encendieron las alarmas en la capital puntana.
A su vez, un militar de la V Brigada Aérea de Villa Reynolds que se encontraba de servicio este sábado tuvo algunos síntomas respiratorios leves, lo que activó el protocolo sanitario. Según su testimonio, recientemente estuvo en la localidad de Tilisarao durante dos días visitando a un familiar. Por esta razón, se decidió realizarle el test de Covid-19 y ahora se esperan los resultados.
“Con dolor, pero con fuerza y optimismo a partir de hoy volvemos a la Fase 1”, manifestó el gobernador Rodríguez Saá al comunicar el endurecimiento de la cuarentena.
A partir de ese momento las redes sociales explotaron con mensajes y fotos del paciente. Recién pasada la medianoche llegó la autorización formal. La jueza Besso emitió un comunicado en que expresó que “todo aquel que haya mantenido contacto estrecho con esta persona, deberá informar telefónicamente al 107 o al (0266) 5001178”.
En el escrito, la jueza explica que con el objetivo de poder determinar los contactos estrechos, para establecer el alcance de posibles contagios y el aislamiento de los casos sospechosos, Bongiovanni prestó su consentimiento para la divulgación de su imagen y datos personales.
San Luis tenía 11 casos positivos en su mayoría pacientes provenientes del exterior y contactos estrechos. A partir de este caso consignado anoche oficialmente por el gobierno a la Presidencia de la Nación, la provincia volvió a la Fase 1 de cuarentena por 7 días con posibilidades de extenderse en caso de reportar más casos por los contactos estrechos que haya tenido el tambero de Tilisarao.
Una larga tradición
La familia Bongiovanni tiene su origen en una pareja de italianos que se conoció en un puerto itálico para viajar a la Argentina. Don Juan Bongiovanni, oriundo de Pianfey, conoció a una mujer del mismo apellido, pero sin parentesco. Viajaron juntos y se radicaron en Tilisarao, un pueblo agrícola ganadero de la provincia de San Luis ubicado en el Valle del Conlara, nombre de uno de los pocos ríos del mundo que viaja de sur a norte y que cruza a la provincia de Córdoba donde se pierde.
Allí se asentaron y tuvieron 9 hijos. Don Juan murió a los 92 años y le dejó 300 hectáreas de campo a cada uno de ellos como herencia.
“Es preferible tener 20 propiedades menos pero obrar bien en la vida, ser honestos”, cuentan algunos familiares que sabía aconsejar a su familia el anciano gringo.
Uno de los hijos de Don Juan, Bartolo, tuvo dos hijos: Uno murió y otro es Miguel Ángel (el Negro) que es el propietario actual del tambo, padre de Gilberto de 35 años que se contagió de coronavirus.