Una de las costumbres que suelen tener los más pequeños, y algunos adultos también, durante la merienda es sumergir lo que se esté comiendo en su bebida de elección. El clásico ritual de sumergir la galletita dentro de la leche o la chocolatada es una tradición que se pasa de generación en generación. Recientemente, un grupo de expertos develó cuánto tiempo debe permanecer bajo el líquido para maximizar su sabor.
No obstante, no es la primera investigación científica que se publica sobre esta delicia a la hora del té. En 1999, el científico británico Len Fisher divulgó un estudio en el que definía las propiedades físicas de una galleta. La única información que faltaba era la que unos especialistas de la Universidad de Utah revelaron.
Para esta oportunidad, utilizaron una de las marcas de estas golosinas más reconocidas a nivel mundial por su relleno. De esta manera, realizaron varias pruebas que constaron en hundir el alimento dentro del líquido y probar sus efectos según cuánto tiempo permanece.
De esta manera, definieron tres tiempos claves para esta práctica. Si la galletita se sumerge por 1 segundo, absorbe cerca del 50% del líquido, el cual puede incorporar sin deshacerse. Con 2 segundos dicho porcentaje aumenta a 80%, y con 3 segundos alcanza el 100%.
